_
_
_
_
_

El TSJM declara nulo el plan del Ayuntamiento para reformar el frontón Beti Jai

El PSOE y la asociación Madrid, Ciudadanía y Patrimonio denunciaron el modelo de restauración del edificio, Bien de Interés Cultural

El interior del frontón Beti Jai, durante las obras de consolidación.
El interior del frontón Beti Jai, durante las obras de consolidación.KIKE PARA
Más información
El resurgir del frontón Beti Jai
Cuatro inversores aspiran a la concesión del Beti Jai

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha declarado la nulidad del plan especial para reformar el frontón Beti Jai, un edificio histórico ubicado en el distrito de Chamberí y declarado Bien de Interés Cultural. La Sección Primera de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJM ha adoptado este acuerdo en dos sentencias tras estimar los dos recursos interpuestos por la Asociación Madrid, Ciudadanía y Patrimonio (MCyP) y por las concejalas socialistas Purificación Causapié y Mercedes González contra este plan de remodelación, que prevé la construcción de una cubierta. Desde el Ayuntamiento de Madrid ya han avanzado que recurrirán ambos fallos porque, según han asegurado fuentes municipales, "defienden su proyecto".

El 27 de septiembre de 2017 el pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobó el plan especial para remodelar el histórico frontón, ubicado en el número 7 de la calle de Marqués de Riscal, que el anterior Gobierno municipal expropió por su mal estado de conservación y que el equipo de Manuela Carmena busca recuperar. MCyP interpuso uno de los recursos contra el proyecto al asegurar que la construcción de una cubierta sobre el frontón contraviene la protección patrimonial del edificio, declarado como monumento nacional en 1991 y Bien de Interés Cultural en 2011 por la Comunidad de Madrid, ya que supondría una "alteración importante" del edificio.

"Es otra vez lo mismo, el urbanismo lo hacen los jueces", ha señalado la edil socialista Mercedes González, que ha precisado que "una vez más" la justicia anula un plan urbanístico del Gobierno de Manuela Carmena, al igual que sucedió con la reforma del estadio Wanda Metropolitano, que carecía de los informes preceptivos requeridos.

El PSOE-M basó su recurso en esta causa, ya que no existían informes de viabilidad económica del plan, es decir, de un estudio económico-financiero, ni de impacto acústico por la zona de protección acústica y ambiental donde se encuentra el Beti Jai. También alegaron que el proyecto carecía de un informe de impacto de género. "Nos da el TSJM la razón en los tres y además condena en costas al Ayuntamiento en 3.009 euros más IVA", ha recalcado González, que ha insistido en que el PSOE-M ha recurrido primero "la forma" en la que se ha planteado el proyecto, pero también "el fondo".

En esta línea, ha explicado que la construcción de la cubierta "incumple el plan General de Ordenación Urbana (PGOU)", al tiempo que ha apuntado a que este proyecto de reforma era "una excusa para un fin político determinado", que los socialistas, ha dicho, aún no saben cuál es. "Ese edificio Bien de Interés Cultural de un interés patrimonial absoluto en lugar de ser un equipamiento público destinado y gestionado para lo público iba a ser cedido", ha esgrimido.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Concurso de ideas

El Ayuntamiento de Madrid convocó un concurso de ideas para buscar la solución técnica más adecuada para los posibles usos del histórico frontón Beti Jai ('Siempre fiesta', en vasco), que fue elegido por un jurado el pasado 13 de noviembre, aunque aún no ha sido adjudicado. Este concurso ha sido recurrido por Ciudadanos ante el Tribunal Administrativo de Contratación Pública al considerar que el proyecto ganador no cumple con las bases y pone en cuestión la protección del patrimonio en este frontón, protegido como BIC. El PSOE-M ha avanzado que también recurrirán este proceso cuando el Área de Cultura del Ayuntamiento lo adjudique.

'Bizitza berria, nueva vida para el Beti Jai" fue el proyecto elegido para rehabilitar el único frontón que queda en pie en Madrid, construido en 1894 por el arquitecto Joaquín Rucoba para albergar encuentros de pelota vasca. A partir de 1919 dejó de emplearse como instalación deportiva, desde entonces fue utilizado como comisaría de policía y cárcel, espacio de ensayos para las bandas de música de la Falange Española, escuela militar o taller de coches, entre otros.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_