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A Coruña admite más pisos en zonas privilegiadas

El urbanista Busquets pacta con el gobierno del PP cambios en su plan

El urbanista Joan Busquets, ayer en A Coruña.
El urbanista Joan Busquets, ayer en A Coruña.GABRIEL TIZÓN

Un poco menos de superficie edificable y más espacios para equipamientos públicos y zonas verdes que el mínimo legal. Pero también se diseñan para A Coruña nuevos edificios en altura, de hasta 9 o 16 plantas, que no estaban inicialmente previstos en lugares privilegiados de la ciudad, como los entornos de la Torre de Hércules, del céntrico puerto y de la avenida Alfonso Molina, la principal vía de entrada y salida. Son en resumen algunos de los principales cambios que el gobierno local de Carlos Negreira (PP) hizo introducir en el nuevo Plan General de Ordenación Municipal que llevará el lunes al pleno para su aprobación provisional.

El documento revisa el que ya aprobó inicialmente en diciembre de 2009 el Ayuntamiento, entonces gobernado por socialistas y nacionalistas. Pero estos, antes de pasar a la oposición hace un año, dejaron inconclusa la tramitación del proyecto urbanístico contra el que se habían presentado 27.680 alegaciones y contaba con los informes desfavorables de hasta ocho departamentos u organismos del Estado y la Xunta, como Costas, Patrimonio o Aena. Y ahora, aprovechando la necesidad de recoger las pegas de ciudadanos y administraciones públicas, el equipo de gobierno del PP decidió conservar el mismo plan inicial, diseñado por el urbanista catalán Joan Busquets, y añadirle algunas premisas. Como los cambios previstos en los cuatro muelles del viejo y céntrico puerto que serán desafectados cuando petroleros y otros tráficos de mercancías peligrosas se trasladarán, dentro de unos tres años a la nueva dársena exterior de Punta Langosteira. Son terrenos en primera línea de la ría coruñesa, concretamente el equivalente a 40.000 campos de fútbol (40.000 hectáreas). Se mantiene la previsión de superficie edificable. Pero el gobierno del PP hizo aumentar la altura máxima de los pisos que se puedan construir con vistas privilegiadas, hasta nueve o diez plantas. Y también redujo del 50% al 40% la reserva de viviendas en esa zona que serán de protección oficial y precio tasado.

En la zona que ocupa el puerto actual se podrán levantar 10 pisos

El equipo de Negreira también aprovechó la reforma del nuevo plan urbanístico para solucionar “herencias incómodas” como los “cinco mamotretos” previstos por el exalcalde socialista Francisco Vázquez en el entorno de la Torre de Hercules. Ponía en peligro el titulo de Patrimonio de la Humanidad del monumento. Pero como los promotores ya habían acudido a los tribunales para reclamar indemnizaciones millonarias, al final se soluciona alejando y reduciendo el número de edificios de gran altura del ancestral faro. “Estarán por debajo de la rasante” para no tapar las vistas, aseguró el edil de Urbanismo, Martín Fernández Prado. Y en la avenida de Alfonso Molina también se añade una torre residencial de 16 plantas de altura.

No obstante, la superficie de nueva edificación, en total 3,5 millones de metros cuadrados, se reduce un 10% en el conjunto de la ciudad. Y se mantiene la reserva de que el 40% de las nuevas viviendas que se construyan (24.900) sean de protección oficial. “No hay cambios sustanciales”, aseguró ayer Joan Busquets, tras reunirse con el equipo de Negreira y los tres grupos de la oposición. Las reformas introducidas en su documento inicial “mejoran” la planificación urbanística de la ciudad, remachó. Aunque reconoció que la piedra angular de su proyecto es la movilidad y más transporte público como tranvía, metro ligero y corredores de bici. Un asunto que A Coruña,, saturada por el tráfico rodado, está aún lejos de resolver. Y menos con los ajustes en el gasto público.

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