Aviones de EE UU bombardean la prisión de Mazar-i-Sharif ante la resistencia talibán

Aviones norteamericanos han bombardeado esta madrugada a los combatientes extranjeros pro talibán parapetados en la fortaleza de Qila-i-Jhangi, a 10 kilómetros al oeste de Mazar-i-Sharif, en el norte de Afganistán.

Aviones AC130 han atacado de manera intermitente la ciudadela y han logrado probablemente que estallara el polvorín del que se adueñaron el pasado domingo estos combatientes extranjeros, después de su rebelión.

Estos combatientes extranjeros, unos 600 y paquistaníes en su mayoría, fueron encarcelados en esa fortaleza del general uzbeko Abdul Rashid Dostum después de rendirse en Kunduz.

Entre el pasado domingo y ayer lunes estos combatientes pudieron sufrir unos 300 ó 400 bajas en los combates mantenidos con la Alianza del Norte y en los bombardeos de la Aviación norteamericana contra sus posiciones en la fortaleza.

Desliegue terrestre en Kandahar

Tras la llegada de estos marines se desarrollan intensos combates cerca de Kandahar, en Spin Boldak (junto a la frontera con Pakistán), después de que los talibanes hayan perdido el control del aeropuerto de su tradicional feudo, según una fuente cercana al ex gobernador de Kandahar.

Este primer despliegue masivo de tropas de tierra estadounidenses marca una nueva fase en la guerra. Hasta ahora su presencia en suelo afgano se limitaba a unidades especiales y asesores militares.

EE UU y Reino Unido reconocen sus primeros heridos

Después de que fuentes gubernamentales estadounidenses reconociesen ayer que un miembro de la CIA murió en el motin de la fortaleza de Qalai Jangui, la cadena CNN, que cita fuentes del Pentágono, informa de que al menos cinco soldados de las fuerzas especiales de Estados Unidos resultaron heridos en la misma revuelta.

Al parecer, los cinco soldados sufrieron heridas por la explosión de una bomba de precisión lanzada por aviones de EE UU durante la supresión del motín de talibanes prisioneros.

"Ninguno de los soldados sufrió heridas que pongan en peligro su vida, pero tres de ellos fueron evacuados", han añadido las fuentes.

Los soldados estadounidenses, junto con un puñado de efectivos de las fuerzas especiales del Reino Unido, dirigieron la supresión de la revuelta de talibanes en Mazar i Sharif, en la que, según algunos informes de corresponsales extranjeros, resultaron muertos decenas de prisioneros.

Un corresponsal del diario The New York Times, que estaba en el fuerte donde ocurrió el enfrentamiento, describió cómo los soldados estadounidenses y británicos se pusieron al frente de la acción y dirigieron los ataques aéreos sobre el área controlada por los amotinados.

También el gobierno británico ha reconocido esta misma tarde que varios de sus soldados han resultado heridos en Afganistán. El ministro británico de Defensa, Geoff Hoon, ha realizado el anuncio pero no ha especificado qué operaciones bélicas se han producido las bajas.