El PNV suspende "toda colaboración" con el Gobierno tras el rechazo a Bildu
El PP se queda solo en defensa del fallo del Tribunal Supremo contra la coalición
La anulación de las listas de Bildu por parte del Tribunal Supremo ha provocado su primera consecuencia política de gran calado. El PNV, que ha facilitado la gobernabilidad de España en el último año como principal aliado del PSOE en el Congreso, suspendió ayer "toda colaboración" con el Gabinete de Zapatero "para sus nuevas iniciativas". Una decisión que adoptó la dirección jeltzale tras considerar al Gobierno socialista "responsable de la promoción de la tesis en la que se ha fundamentado" la resolución judicial. El Ejecutivo acogió la noticia con sorpresa y prudencia, al tiempo que se confesó a la espera de conocer las razones concretas de la ruptura.
El vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba habló el domingo a última hora con el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, quien le trasladó su desacuerdo con la sentencia del Supremo, que se acababa de conocer, pero no le notificó su intención de romper con el Gobierno, según informa Luis R. Aizpeolea. La decisión que el PNV adoptó ayer, sin embargo, ratificó la advertencia previa de retirar su apoyo parlamentario a Zapatero si Bildu no podía concurrir finalmente a las elecciones municipales y forales vascas del próximo día 22. Un aviso con el el que propio líder jeltzale aseguró que no iba de farol.
La ruptura de los nacionalistas no afecta a los acuerdos ya alcanzados
Los partidos cargan de presión al Tribunal Constitucional
Fue el propio Urkullu quien escenificó ayer en Bilbao el alejamiento del PSOE, apenas medio año después del pacto presupuestario que abrió la puerta al traspaso a Euskadi de las competencias recogidas en el Estatuto de Gernika y aún pendientes. Según confirmaron fuentes del partido nacionalista, la ruptura no afecta al desarrollo de los acuerdos ya alcanzados, sino que repercutirá en futuras negociaciones, como la del techo de gasto o las cuentas generales de 2012. Una decisión que deja al Gobierno sin su aliado más fiel de los últimos meses, en un escenario marcado por la crisis económica y la tregua de ETA.
El PNV fue el partido vasco que más tardó en analizar la prohibición de las listas de Bildu, quizá por su compleja ubicación, a medio camino entre las formaciones constitucionalistas y abertzales, si bien su pronunciamiento fue el más contundente. Con él quiso dar una respuesta al denominado polo soberanista, que horas antes había criticado la tibieza peneuvista sobre la sentencia del Supremo. "No tiene sentido que en el actual contexto político y social, la respuesta judicial haya sido la anulación de todas las candidaturas", lamentó Urkullu durante una rueda de prensa en la que no admitió preguntas.
La principal formación vasca mostró su más "absoluto rechazo a la ilegalización" de Bildu y anunció que mañana se reunirá con los representantes de la coalición para conocer de primera mano sus impresiones, aunque no tomará parte en las concentraciones de protesta convocadas para hoy en varios municipios vascos. Urkullu avanzó que, aunque ajeno al proceso judicial, su partido defenderá la revocación de la decisión del Supremo. En este sentido, realizó un llamamiento al Tribunal Constitucional para que "tome en consideración la opinión mayoritaria de la sociedad vasca al formar su criterio jurídico" ante el anunciado recurso de Bildu.
La petición del PNV coincidió con la trasladada por los distintos partidos nacionalistas vascos, que eludieron la teórica división de poderes y dirigieron sus demandas al Constitucional como última oportunidad de reconducir la situación. Un planteamiento en el que coincidieron a título particular destacados socialistas de Euskadi, pese a que la posición oficial del PSE buscó la neutralidad. El fallo judicial evidenció ayer la soledad del PP vasco en esta materia.
Frente a la satisfacción que en el Gobierno central produjo la anulación de Bildu, el Ejecutivo autónomo se limitó a reiterar que "acata y respeta" las resoluciones judiciales, "con independencia de que comparta o no su contenido". Un pronunciamiento con el que coincidió el portavoz del PSE, José Antonio Pastor, quien recordó que los promotores de la coalición "tienen ahora el derecho de recurrir esa resolución ante el Tribunal Constitucional". Más contundente se mostró el alcalde socialista de San Sebastián, Odón Elorza, quien consideró "un error" un fallo judicial que respeta, pero no comparte "en absoluto". En una línea muy similar se manifestó el diputado del PSOE en el Congreso Txiki Benegas, quien señaló que "el que EA y Alternatiba no puedan concurrir a las elecciones no tiene sentido".
Más explícito que los socialistas se mostró Aralar, que reflejó su "rechazo frontal" a una decisión que "ha hurtado a la ciudadanía el derecho de poder ejercer libremente su voto". La formación soberanista, aunque no integrada en Bildu, coincidió con la impresión de la coalición al percibir "un claro impulso político" tras la sentencia y destacó, en este sentido, la responsabilidad del PSOE.
El líder de EA, Pello Urizar, instó por su parte a los socialistas a que se alejen de sus pronunciamientos oficiales y transmitan en público las opiniones favorables a Bildu que sostienen "de puertas hacia dentro". EB también se dirigió al líder del PSE y del Gobierno vasco, el lehendakari, Patxi López, a quien emplazó a liderar una iniciativa política e institucional para hacer frente al "atropello democrático" que, a su juicio, ha supuesto la sentencia del Supremo. "No puede permanecer de brazos cruzados ante la exclusión electoral de una parte importante de la ciudadanía", exigió, a través de un comunicado.
En el lado opuesto de la balanza se situó el PP. El presidente de la formación en Euskadi, Antonio Basagoiti, se valió de la resolución judicial que vincula Bildu a la estrategia de ETA y consideró que "el listón democrático no puede adaptarse en función de opiniones o de cambios de nombre". UPyD fue más allá, al calificar como una "gran noticia" la anulación de la coalición.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.