Muere María del Carmen Martínez-Villaseñor, la popular ventrílocua del espectáculo Mari Carmen y sus Muñecos, a los 80 años
La artista fue durante muchos años fija en los programas televisivos de variedades, casi siempre acompañada de Doña Rogelia, su creación más conocida
La ventrílocua María del Carmen Martínez-Villaseñor, más conocida por su nombre artístico, Mari Carmen y sus Muñecos, ha muerto este jueves en Tenerife a los 80 años, según ha informado Dario Dolz, alcalde Cuenca, ciudad de nacimiento de la popular artista. “Ha fallecido María del Carmen Martínez-Villaseñor Barrasa, nuestra querida Mari Carmen y sus muñecos, que ha sido una gran embajadora de Cuenca. Mi más sincero pésame, en nombre de los vecinos de Cuenca, para sus familiares y seres más queridos”, ha escrito en Twitter Dolz. Las primeras informaciones apuntan a que ha fallecido a consecuencia de una caída en su domicilio.
Nacida en Cuenca en 1943, con 16 años ya estaba inmersa en el mundo del teatro de guiñol y años más tarde se especializó como ventrílocua. En 1967 se estrenó en el programa de TVE Noche del sábado y en 1971 apareció en la gran pantalla: participó en La graduada, dirigida por Mariano Ozores y en la que compartió reparto con Lina Morgan, Jose Sacristán o Florinda Chico. Después le llegó la fama en España y Latinoamérica, con actuaciones con sus muñecos en teatros y en programas de diversas cadenas de televisión. Los cuatro muñecos con los que saltó a la fama fueron Nícol, el pato castizo e irreverente; Daisy, la adolescente rebelde; Rodolfo, el león sensible y entrañable, y, sobre todo, Doña Rogelia, la anciana gruñona. Sus locas conversaciones con Doña Rogelia eran su número estrella, siempre trufadas con su clásico “¿mande?”.
Participó en programas como Un, dos, tres...responda otra vez, ¡Señoras y señores! o Aplauso. Hubo unos años en los que su presencia era habitual en la televisión pública. Después, con la llegada de las cadenas privadas, ella siempre tuvo su hueco. Además, su particular sentido del humor fue recurrente en las muchas galas que producía José Luis Moreno.
En los años noventa llegó a tener su propio programa de entrevistas, ¡Ay, vida mía!, en el que sus muñecos se encargaban de entrevistar al personaje invitado. En las últimas décadas su presencia televisiva comenzó a ser residual. Nunca anunció su retirada. Hace apenas dos meses dijo en Sálvame Deluxe. “En mayo cumplo 80 vueltas al mundo y sin marearme. Me encanta mi trabajo. Soy Tauro y me gusta la pasta, pero a veces me he ido sin cobrar, solo por el placer de trabajar”.
En otra entrevista reciente con Los Lunes Seriéfilos mostró su desencanto con el medio donde se hizo popular: “No entiendo lo que le ha pasado a la televisión. Ya no hay nada para niños, ni teatro, ni nada. ¿Dónde está Estudio 1? La categoría… ¿dónde está?”.
Martínez-Villaseñor también publicó libros, como Ventana al Edén, ¿Mande? Mis locas conversaciones con Doña Rogelia o La crisis en Orejilla del Sordete.
En cuanto se supo su muerte usuarios de redes sociales como Twitter escribieron mensajes recordándola. El humorista Pedro Ruiz ha escrito: “Me quedo herido ante la noticia de la muerte de Mari Carmen Martínez Barrasa. Mari Carmen es irrepetible. Genio, pasión, identidad... Mucha paz, amiga mía”.
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