Portugal investiga una decena de muertes tras demoras en la atención teléfonica del 112

La ministra de Sanidad de Portugal, Ana Paula Martins, anunció este martes en el Parlamento que exigirán responsabilidades si se demuestra que las demoras en la atención del 112 provocó la muerte de 11 pacientes. Algunos de estos fallecimientos están siendo investigados por la Fiscalía, que está recabando datos sobre otros casos para decidir si también inicia un procedimiento. En paralelo a la vía judicial, también el Instituto Nacional de Emergencias Médicas (INEM) ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias de los fallecimientos. Los retrasos en la respuesta del teléfono de emergencias sanitarias ocurrieron durante la protesta laboral de los técnicos del servicio, que convocaron una huelga de horas extraordinarias.

El INEM, que gestiona la línea telefónica del 112, sufre desde hace años déficit de personal, que obliga a los técnicos a tener que realizar numerosas horas extras para atender las necesidades de los turnos y, al mismo tiempo, compensar sus bajos salarios. El paro fue desconvocado la semana pasada tras una reunión de la ministra de Sanidad con los representantes sindicales, pero las repercusiones de los días del conflicto han causado la primera gran tormenta política sobre el Gobierno de centro-derecha de Luís Montenegro.

Varios partidos de la oposición han exigido la dimisión de Ana Paula Martins como ministra de Sanidad. Le reprochan sobre todo que no impidió el impacto del paro en el funcionamiento del servicio, a pesar de haber sido advertida con más de una semana de antelación. Martins ya ha asegurado que no renunciará al cargo y que asume “toda la responsabilidad” sobre lo que haya funcionado mal en el INEM.

En una intervención en la Asamblea de la República, la ministra explicó que los servicios mínimos fueron incumplidos “por falta de recursos humanos” durante ocho horas el pasado lunes 4, cuando se desatendieron varias peticiones de auxilio médico a enfermos que finalmente fallecerían. La ministra ha solicitado a la Inspección General de Actividades Sanitarias que investigue si se produjeron responsabilidades del servicio en el incumplimiento de los servicios mínimos.

Ese lunes, además, coincidieron la huelga de las horas extraordinarias de los técnicos de emergencias sanitarias con el paro general en la administración pública. “Lamento profundamente la situación que muchas familias vivieron”, dijo Martins, que se comprometió a poner en marcha “una refundación” del INEM. “La ministra sabía que la huelga iba a desarrollarse con más de diez días de anticipación y no reaccionó”, criticó el diputado socialista, João Paulo Correia.

Desde 2019 se ha producido una disminución constante de los técnicos de emergencias sanitarias. A pesar de los procesos de contratación de personal abiertos en el pasado, las malas condiciones laborales favorecen una gran inestabilidad en las plantillas y el abandono continuado de trabajadores.