Francia mantiene sin cambios el confinamiento “al menos” 15 días más

Francia seguirá confinada en las condiciones actuales “al menos” 15 días más. Cuando se cumplen dos semanas del segundo confinamiento nacional, el primer ministro, Jean Castex, ha anunciado este jueves que las cifras de la pandemia empiezan a mostrar algunas señales esperanzadoras, pero que estas no bastan para suavizar el encierro, sobre todo en lo que concierne a los comercios no indispensables, que son los que más han presionado al Gobierno para que abra la mano. No será así porque “sería irresponsable levantar o aligerar el dispositivo ahora”, ha dicho Castex en rueda de prensa.

“Nuestra estrategia de confinamiento parece producir los primeros efectos esperados, aunque debemos ser muy prudentes”, ha subrayado Castex. Por ello, ha agregado, “hemos decidido mantener sin cambios al menos durante los próximos 15 días las reglas del confinamiento”.

El 1 de diciembre, y solo si mejoran más los datos sanitarios, los comercios ahora cerrados podrían reabrir, ha adelantado, si bien la medida no afectaría aún ni al sector de la restauración ni a los gimnasios, que deberán seguir cerrados por un tiempo indefinido. Aunque el objetivo declarado es “un nuevo aligeramiento” de las condiciones de cara a las Navidades, “para que los franceses puedan pasar las fiestas en familia”, estas, ha advertido Castex, “no podrán celebrarse como antes”, es decir, adiós a las cenas y encuentros de decenas de familiares y, sobre todo, a las fiestas de Nochevieja. “No sería razonable” hacer grandes festejos, ha insistido.

Francia mantiene sin cambios el confinamiento “al menos” 15 días más

Aunque mucho más suave que el de la primavera, el nuevo confinamiento ha provocado una profunda indignación e inquietud sobre todo entre los pequeños comerciantes que se han visto obligados a cerrar, una vez más, en uno de los momentos más importantes en ventas del año, antes de las Navidades. El Gobierno había dado a entender que podría revisar su orden de cierre de todo comercio no esencial —básicamente de alimentación, aunque también permanecen abiertos negocios muy especializados como chocolaterías o tiendas de té, así como materiales de trabajo y productos tecnológicos— a las dos semanas de confinamiento. Pero en los últimos días, varios responsables ya habían echado un jarro de agua fría a estas esperanzas, en vista de que la evolución de la pandemia no es todo lo buena que se desearía. “Todavía no hemos alcanzado el pico de la epidemia”, advirtió el lunes el director general de Sanidad, Jérôme Salomon. Según acotó este jueves el ministro de Sanidad, Olivier Véran, ese pico podría alcanzarse en “los próximos días”.

Francia se acerca ya a los dos millones de contagios desde el comienzo de la crisis en la primavera (más de 1,8 millones de casos confirmados, según las últimas cifras) y hace unos días rebasó la barrera de los 40.000 muertos y el récord absoluto de 60.000 contagios en 24 horas. El lunes, Francia registró además la mayor cifra de muertos en un solo día, 551, desde el comienzo de la pandemia y la situación en los hospitales sigue tensándose, con una tasa de ocupación de las camas en reanimación del 94,7%, según las últimas cifras oficiales. Las imágenes del traslado de pacientes graves de una región a otra que tanto impactaron durante el primer confinamiento vuelven a producirse, una señal más de que lo peor de la nueva crisis está aún lejos de haberse superado.

“Una de cada cuatro muertes en Francia es por covid-19”, enfermedad que provoca “una hospitalización cada 30 segundos y un ingreso en reanimación cada tres minutos”, ha resaltado Castex.

Algunos datos son no obstante alentadores. La tasa de incidencia en una semana —número de personas diagnosticadas positivo por test de covid-19 por cada 100.000 habitantes— sigue siendo muy alta, 427,9, pero ha bajado respecto de la semana pasada (497 casos por 100.000 habitantes). De igual modo, la tasa de positividad se sitúa por primera vez en esta segunda ola en menos del 20% (19,5%). También el número de reproducción (R) ha bajado del 1 (está en 0,93), otra señal de que la epidemia empieza a remitir y que le hace al Gobierno sentirse “prudentemente” optimista pero decidido a no bajar la guardia por ahora.

Múltiples “transgresiones” del confinamiento

Durante su comparecencia, Castex ha llamado a no relajar las costumbres. Una demanda nada banal. Según una encuesta publicada este jueves por el instituto Ifop, el 60% de los franceses admiten haber “transgredido” las normas del confinamiento, que permiten las salidas —bajo declaración jurada— solo para desplazamientos por trabajo, para realizar compras esenciales, acompañar a personas vulnerables, acudir a citas médicas u oficiales o para “airearse” por un máximo de una hora diaria en un radio de un kilómetro del domicilio.

El ministro del Interior, Gérald Darmanin, ha reclamado un refuerzo de los controles —hasta ahora la mayor parte de los franceses dice no haber sido controlado para ver si portaban justificante de salida— y una “atención específica” en las grandes ciudades a los parques y jardines que, en este nuevo confinamiento, permanecen abiertos. Según el propio Darmanin, entre el 30 de octubre —primer día del nuevo confinamiento— y el 9 de noviembre, se han puesto 88.455 multas por incumplimiento del confinamiento, casi un tercio de ellas en la región de París y 315 más por apertura ilegal de comercio.

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