El alcalde del pueblo valenciano de Benavites, detenido por violencia de género

Un juez de Sagunto decretó el pasado sábado la libertad provisional con orden de alejamiento para el alcalde de Benavites, diputado provincial y coordinador general del partido, Carlos Gil, en el marco de una causa abierta por un presunto delito de malos tratos en el ámbito de la violencia de género. La detención y puesta a disposición judicial se produjo tras una denuncia de su mujer, de la que se encuentra en trámites de separación. El primer edil aseguró en la sede judicial que la denuncia era falsa y negó haber agredido a su pareja.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, el juzgado recibió al detenido el pasado sábado y decretó su libertad provisional, con la medida cautelar impuesta de una orden de alejamiento (no puede acercarse a menos de 80 metros) y prohibición de comunicación respecto de la víctima durante tres meses. Esa medida puede ser prorrogada a petición de la propia perjudicada, según señala el TSJCV.

El alcalde queda como investigado en una causa abierta por un presunto delito de malos tratos en el ámbito de la violencia de género del artículo 153 del Código Penal. El juzgado de guardia acordó el mismo sábado inhibirse de esta causa en favor del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Sagunto, que tiene atribuidas las competencias en materia de violencia sobre la mujer en este partido judicial.

Ante estas informaciones, el PP de la provincia de Valencia ha emitido un comunicado en el que señala que espera que se confirme la versión de Carlos Gil “respecto a la falsedad de la denuncia presentada por su mujer -de la que se encuentra en proceso de separación-” y ha defendido “con rotundidad su derecho a la presunción de inocencia”. “La conducta de Carlos Gil siempre ha sido ejemplar y se ha manifestado firmemente comprometido en la lucha contra la violencia de género, en defensa de la dignidad de las mujeres, y en contra de cualquier tipo de violencia”, señala el partido.

Ante esta situación, el propio investigado se dirigió al presidente del Comité de Ética del PP en la provincia para solicitar la suspensión de militancia hasta que la justicia aclare lo ocurrido, según el partido. En esta línea, el PP subraya que los estatutos internos del partido “están para cumplirse” y, por tanto, si se establecieran cargos contra Carlos Gil, “se aplicarían de forma inmediata”. No obstante, y atendiendo a la petición formulada por el propio Gil, el PP ha procedido a la suspensión cautelar de militancia y de sus funciones como coordinador general del PP provincial “hasta que se celebre el juicio por la denuncia presentada y se dicte la correspondiente sentencia”, en la que confían que quede acreditada su inocencia.

“El Partido Popular de Valencia es una formación absolutamente sensible contra la violencia machista y totalmente determinada a combatirla en todos los ámbitos”, apunta la formación, que muestra “respeto absoluto” a las decisiones judiciales y solicita “la mayor celeridad” en la resolución de este asunto “para no acumular mayores daños personales en una situación ya de por sí terriblemente dolorosa para todos los afectados”.