Katie Holmes incendia las redes tras acudir a una gala con vaqueros y zapatillas
La actriz se apunta a la estética Y2K con un atuendo que bien podría haber llevado hace veinte años.
Hace tres años Katie Holmes se convertía espontáneamente en icono de estilo al ser fotografiada en Nueva York, días después de su ruptura con el actor Jamie Foxx, llevando vaqueros y un conjunto de dos piezas de chaqueta y sujetador de cashmere. Aquel estilismo, firmado por la firma norteamericana Khaité, no solo lanzó a la enseña a la fama mundial, también protagonizó cientos de copias por parte de marcas low cost. Desde entonces, Holmes se ha convertido en musa para marcas como la propia Khaité, Ulla Johnson o Chloé. Su estética, minimalista y muy natural, a base de prendas básicas y cómodas, es una de las más celebradas y reseñadas.
Es esa misma naturalidad la que la ha vuelto a convertir en viral este fin de semana. Holmes acudía el pasado viernes a la gala de navidad de iHeart Radio (en la que actuaron, entre otros, Dua Lipa o Dove Cameron) luciendo un minivestido palabra de honor sobre unos pantalones vaqueros rectos. En los pies, unas zapatillas deportivas. Ni joyas, ni el pelo peinado de forma aparatosa ni maquillaje. Las redes se han hecho inmediatamente eco de la imagen, algunos usuarios criticando esta opción para un evento de estas caractísticas, por ser demasiado cómodo; otros sin embargo, alabando la elección de Holmes, dado que su aspecto remite rápidamente a la estética que las celebridades juveniles lucían en los primeros años del siglo XXI, momento en el que la actriz era una de ellas gracia sa su papel en la serie ‘Dawson Crece’ y su posterior matrimonio con Tom Cruise, en 2006.
Desde hace dos años, la llamada estética Y2K, es decir, el estilo de hace dos décadas, ha inundado tiendas y pasarelas. Desfiles basados en la indumentaria divertida y desprejuiciada de Britney Spears, Paris Hilton o Lindsay Lohan que se ha traducido en tendencias como los pantalones de tiro bajo, los tops brillantes o los vestidos de lycra. Pero faltaban dos tendencias de aquella época por recuperarse y Holmes, consciente o no, las está recuperando con su elección: la primera, como han recordado muchos usuarios en Twitter, es la de llevar un vestido corto sobre pantalones vaqueros acampanados o rectos. Algo que hoy nos puede parecer una ‘aberración’ (como la mayoría de las modas del pasado reciente) pero que no hace tanto era habitual tanto en las pasarelas como en las calles. De hecho, firmas como Jacquemus, Luis Vuitton o Proenza schouler llevan recuperando la idea un par de años en sus colecciones.
Lo segundo que Holmes nos recuerda con su última aparición es que hubo un tiempo no tan lejano en que los eventos mediáticos y hasta las alfombras rojas no requerían de atuendos artificiosos ni peinados y maquillajes perfectos. Hace veinte años, las celebridades, especialmente las jóvenes, llevaban vaqueros, zapatos planos o vestidos que se pondrían en cualquier otra ocasión menos formal. No había una batalla mediática por ser la mejor vestida, ni siquiera por ser la más extravagante. Sí había, quizá, una intención de que aquellos looks que llevaban actrices y cantantes a galas y ceremonias de premios fueran copiados de forma natural por cualquiera que estuviera dispuesto a ello. Quizá la decisión de Holmes de ir a una gala en vaqueros y zapatillas habra el camino a una nueva generación de famosas dispuestas a romper con el prejuicio de la incomodidad.
this trend reared its ugly head years ago and honestly how dare Katie Holmes have the audacity to try to bring it back pic.twitter.com/oVZ43ZxFsO
— AA (@aliskor15) December 10, 2022
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