“No, no, no era una pregunta”: Meryl Streep, Emily Blunt y Anne Hathaway recrean una de las escenas más famosas de ‘El diablo viste de Prada’

Los premios que concede cada año el sindicato de actores mayoritario de Estados Unidos era una cita importante esta edición, que además presumía de ser el 30 aniversario. A solo dos semanas de los Oscar y tras la huelga que el sector atravesó el pasado otoño, en la velada celebrada la noche del sábado tocaba reivindicar y festejar, pero también divertirse. La presidenta del sindicato SAG-AFTRA, Fran Drescher, alabo la “dignidad colectiva que se alzó para pedir más”. Las actores, vestidos con brillo para la ocasión, se encargaron de repartir galardones a las mejores interpretaciones del año. Menciones que fueron a parar de forma mayoritaria a Oppenheimer y a las series Sucession y The Bear.

Para entregar el premio a Jeremy Allen White por su papel como mejor actor en una serie de comedia por The Bear, se reunió en pantalla el trío de protagonistas de la película de 2006 El diablo viste de Prada: Meryl Streep, Anne Hathaway y Emily Blunt. Las actrices entonces se encargaron de dar vida a la historia de la temible directora de una revista de moda, Miranda Priestly (Streep), y sus dos asistentes (Blunt y Hathaway).

“Dos cosas, me he olvidado de mis gafas y del sobre”, decía Streep tras subir al escenario tropezándose con el micrófono en un vídeo que ya ha sido replicado miles de veces en redes sociales. Para entregarle las gafas y el sobre aparecen por ambos lados Emily Blunt y Anne Hathaway. O mejor dicho, las actrices transformadas en Emily Charlton y Andrea Sachs, porque en unos segundos las tres se vuelven a meter en sus papeles de la película de hace 18 años, basada en el libro superventas de la que fuera asistente de Anna Wintour, Lauren Weisberger.

Miranda Priestly (Streep) continua presentando: “Es una pregunta que tiene años, ¿dónde empieza el personaje y el actor?”, dice. A lo que Blunt le responde: “Bueno, como acabamos de ver Meryl y Miranda Priestly son como gemelas, ¿no?”. La aspirante al Oscar en 21 ocasiones lo niega, “yo no creo ser para nada como Miranda Priestly”, pero Hathaway le corta: “No, no, no era una pregunta”, interviene, parafraseando una de las escenas más célebres de la película. Una que se ha convertido en meme recurrente en redes sociales.

Emily Blunt acudía, vestida de rojo por Louis Vuitton y con joyas Tiffany & Co., en calidad de nominada a actriz de reparto por su trabajo en Oppenheimer. Pero la estatuilla se la llevó Da’Vine Joy Randolph por Los que se quedan. Sí ganó Blunt como parte del elenco de la cinta de Christopher Nolan.

Por su parte, Anne Hathaway acababa de aterrizar de Milán, donde se hizo viral bailando en la fiesta tras el desfile de Versace y alabando a la cantante española Aitana. Para la gala en Hollywood lució con un vestido azul cerúleo que sería muy del gusto de Miranda Priestly, firmado por Versace, con sandalias plateadas de Gianvito Rossi y joyas de Bulgari.

Meryl Streep, para no dar lugar a dudas sobre quién es el diablo en la película, escogió en este caso un diseño de Prada, burdeos con bordados de lentejuelas, que conjuntó con bolso de mano también de la firma italiana.