El PP pide cambiar el formato de comisiones de investigación
El Grupo Popular quiere evitar así incidentes como el que tuvo lugar el miércoles entre el diputado Gabriel Rufián (ERC) y los comparecientes.
El Grupo Popular quiere cambiar el formato de las comisiones de investigación con el argumento de evitar incidentes como el que tuvo lugar el miércoles entre el diputado Gabriel Rufián (ERC) y los comparecientes. Pretende que ese cambio afecte no solo a la de Interior que acaba de constituirse, sino también a otras futuras como la de la crisis bancaria que arranca en abril y la de financiación ilegal del PP que está aprobada ya.
El PP pretende cambiar el modelo de comparecencias ante la comisión de investigación de Interior y, previsiblemente, ante las futuras. Pretende que en lugar de preguntas respondidas una a una por los comparecientes, sea un formato como el de cualquier comparecencia de altos cargos. Es decir, habría intervención del citado, respuesta de los grupos y cierre del compareciente.
Rufián se queja de los insultos del PP
El portavoz adjuto de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, se quejó ayer de las críticas del PP por sus formas en la comisión de investigación sobre la policía patriótica— en la que llamó al exjefe de la Oficina Antifraude de Cataluña "mafioso", "lacayo" o "gánster"— toda vez que a él le insultaron diputados de la comisión. "Algo habitual aquí es que se hable más de las formas que de quien ha conspirado en su despacho y de que diputados durante esa comisión nos llamaran gilipollas, pero nadie me preguntará por eso", lamentó en los pasillos de la Cámara Baja. Las cámaras de televisión captaron al diputado del PP José Alberto Martín- Toledano haciendo el gesto de que Rufián había bebido mientras este intervenía.
Así, el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, atribuyó ayer la "crispación" y la "confrontación" que marcaron la comparecencia de Fernández Díaz en la comisión de investigación al "formato de pregunta, respuesta, pregunta respuesta" elegido por su presidente, Mikel Legarda, del PNV.
"Se lo dijimos previamente, que este no era un formato adecuado para una comisión de investigación, sino que iba a provocar más crispación y confrontación", explicó Hernando. De hecho, poco antes de iniciarse la sesión de la comisión, el PP intentó cambiar el formato. No lo logró porque el resto de grupos alegaron que el reglamento no lo permitía si previamente no se reunía la mesa de la comisión.
En el seno de la comisión ya se pactaron unos tiempos muy limitados de comparecencia que hicieron que cada portavoz intentara agilizar sus preguntas, a costa de cortar las respuestas de los comparecientes. El acuerdo previo de la mayoría era que cada compareciente tuviera un máximo de dos horas y el tiempo casi se cumplió. Incluso, se eliminó la intervención final.
El reglamento del Congreso no concreta cómo deben ser esas comparecencias. La última que se constituyó fue la del 11-M en 2004 y entonces no hubo limitación alguna de tiempo. La comparecencia más larga fue la del exministro del Interior Ángel Acebes que duró 10 horas. Comparecieron, entre otros, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero y solo se evitó la presencia de los entonces procesados y luego condenados.
En esta ocasión ha sido objeto de disputa entre los grupos la lista de comparecientes y las peticiones de documentación. PP, PSOE y Ciudadanos acordaron que se cite a exaltos cargos de Interior y no a policías.
El próximo día 18 de abril se reunirá la comisión para establecer un nuevo calendario y estudiar las peticiones de los grupos. El PP quiere que sirva de precedente para las futuras, como la de la crisis bancaria que presidirá Ana Oramas de Coalición Canaria y la de financiación ilegal del PP que quiere presidir Ciudadanos.
Podemos anunció ayer que va a solicitar también la comparecencia del exministro del Interior Alfredo Pérez Rubalcaba en la comisión de investigación sobre la utilización partidista del Ministerio del Interior, según anunció el líder, Pablo Iglesias, en rueda de prensa en el Congreso. “Ha quedado claro [en la sesión del miércoles en la comisión] que los trabajos que se estaban haciendo en el Ministerio del Interior para hostigar a rivales políticos pueden venir de atrás”, argumentó Iglesias, que volvió a reclamar que comparezcan los expolicías Eugenio Pino —el que fue número dos de la policía— y el comisario ya jubilado José Manuel Villarejo. El PSOE, no obstante, no apoyará la petición de Podemos para que Rubalcaba sea llamado a la comisión, según confirmaron a EL PAÍS fuentes del grupo parlamentario, mientras el PP evitó desvelar el sentido de su voto.
