El SUP respaldará a los policías que se nieguen a participar en desahucios

El Sindicato Unificado de la Policía (SUP), el mayoritario del cuerpo, adoptó este domingo una decisión revolucionaria. Anunció que respaldará legalmente a los agentes que se vean incapaces de ejecutar desahucios. También pidió al Gobierno que tome medidas para paralizar los desalojos. Otras fuerzas sindicales tacharon de “barbaridad” y de “muy difícil” aplicación la propuesta del sindicato policial con más implantación.

El secretario general del SUP, José Manuel Sánchez Fornet, explicó que se debería aplicar la objeción de conciencia en determinados supuestos como los desahucios o la expulsión de inmigrantes a lugares inseguros. “Si hay un compañero al que anímicamente le puede afectar esta situación, le aconsejamos que haga una minuta [un escrito oficial] y que se dé de baja. Nosotros le apoyaremos, incluso judicialmente”, explicó Sánchez Fornet. Este recordó que los policías, cuando acuden a un desalojo, están cumpliendo una resolución judicial. “Los agentes pueden no tener la fortaleza mental para hacer este servicio y caer en una depresión o en una enfermedad que le afecte psicológicamente. A veces pueden estar entre la espada y la pared”, añadió Fornet.

Los otros sindicatos del cuerpo rechazaron la postura del SUP. Entienden que si un agente toma esa decisión estaría vulnerando la ley. Antonio Sánchez Esturillo, de la Unión Federal de la Policía (UFP), lo calificó de “barbaridad”: “No se trata de que no estemos sensibilizados, sino que resulta algo obligatorio porque la policía no puede objetar. Si tenemos prohibido el derecho de huelga, mucho más el no cumplir nuestras obligaciones. Esperemos que ningún policía siga ese consejo”, concluyó.

Ignacio López, secretario general de la Confederación Española de la Policía (CEP, el segundo mayor sindicato del cuerpo), también rechazó la medida, aunque reconoció “el desánimo y el componente social” de la actuación policial en los desahucios. Eso sí, puntualizó que las consecuencias a las que se enfrenta un policía son muy amplias. Podría incurrir en los delitos de desobediencia y de negación de auxilio a la justicia, además de que se le abriría un procedimiento disciplinario interno que podría desembocar hasta en la expulsión del cuerpo. “Rechazamos amparar una conducta delictiva”, añadió López.

Los que sí apoyaron la iniciativa del SUP fueron los Mossos d’Esquadra: “No queremos ser los ejecutores de sentencias que podrían resultar manifiestamente injustas”, explicó Valentí Anadón, de SAP-UGT, informa Camilo S. Baquero. Sin embargo, aceptaron que tienen poco margen para aplicar la objeción de conciencia, se quejó Antoni Castejón (SME-CCOO). Ambas asociaciones celebraron la posibilidad de un cambio legislativo que ponga fin a “situaciones gravísimas”.

Por parte del Colectivo Profesional de Policía Municipal (CPPM) en Madrid, se ven como “injustas” las situaciones producidas en los desahucios, pero también recuerdan que los policías están obligados a intervenir y cumplir las órdenes judiciales. “Llamar a la objeción de conciencia es problemático, ya que el propio juez podría abrir diligencias contra el agente. ¿Qué más nos gustaría que poder objetar en determinadas ocasiones?”, señaló el portavoz de Madrid del CPPM, Julián Leal, que mostró su apoyo a la medida del SUP.