Asesinados cinco menores y otros dos jóvenes en Tlaquepaque, Jalisco
Los muchachos, de entre 14 y 23 años, fueron tiroteados a las afueras de una casa en el Estado de Jalisco. La población menor edad vuelve a ser el objetivo de las balas en México
La violencia vuelve a dejar su espesa huella en el Estado de Jalisco. En la madrugada del domingo han sido asesinados a balazos siete jóvenes, entre ellos cinco menores de edad, a las afueras de una casa del municipio de Tlaquepaque, en el área metropolitana de Guadalajara. El fiscal general del Estado ha informado que entre las víctimas había una chica de 14 años, otra de 15, tres niños que apenan llegaban a la quincena de edad y dos adultos de 20 y 23 años. Otros dos menores de edad resultaron gravemente heridos. Uno de ellos se ha sumado a la lista de víctimas este lunes. El reconocimiento de los cuerpos lo tuvieron que hacer sus propios familiares. Como muchos crímenes en México, hasta el momento el asesino no tiene rostro.
El fiscal ha informado de que los chicos estaban reunidos en algún lugar sin especificar del municipio, y que tras moverse al punto donde ocurrieron los asesinatos, un grupo armado les disparó 10 veces entre las calles empedradas de Santiago de Linier y Lanús. La Fiscalía investiga el espacio en el que los jóvenes estaban conviviendo antes de que fueran baleados para conocer si tiene relación con sus asesinatos en la colonia Francisco I. Madero.
El municipio de Tlaquepaque ha sufrido un febrero negro. En lo que va de mes en sus calles se ha asesinado a nueve personas, a los que ahora se suman los cuatro menores de edad y otro dos jóvenes. Los otros dos heridos están graves, según ha reportado el jefe de la Fiscalía de Jalisco.
La muerte de estos siete jóvenes se suma a una larga lista de masacres ocurridas en el último año, en la que el patrón que dejan ver los crímenes parecen tener un objetivo claro: la población más joven. El último antecedente fue el asesinato el pasado 15 de enero de dos menores de edad y una chica de 19 años en el municipio de Amozoc, en el Estado de Puebla. Un mes antes, 11 muchachos fueron masacrados en una posada navideña en Salvatierra, Guanajuato, la región más afectada por la violencia en 2023. Pocos días antes, seis estudiantes de medicina en Celaya; en septiembre, otra media docena, en Zacatecas. Y en la memoria, el recuerdo del brutal asesinato retransmitido en redes sociales de cinco jóvenes de Lagos de Moreno, también en Jalisco.
A los asesinatos de la población joven se suma unos altos niveles de impunidad para quien aprieta el gatillo. En el Estado de Jalisco solo el 0,47% de los crímenes denunciados fueron resueltos en 2023, según el portal Impunidad Cero. A nivel nacional, solo 14 de cada 100 delitos se resuelven. Lo más preocupante es que solo el 6,4% se denuncian. Las cifras demuestran que hay miedo a denunciar y no hay confianza en que las instituciones puedan resolver los casos. El fiscal de Jalisco ha anunciado que se tratará de dar con los culpables de este crimen mientras las familias lloran, una vez más, a sus jóvenes.
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