El asesinato de cinco estudiantes en Celaya sacude por enésima vez a Guanajuato

En Guanajuato se vuelve a sufrir la violencia silenciosa. El Estado con más homicidios de México se ha visto sacudido este domingo por el asesinato de cinco estudiantes de entre 20 y 30 años. Los cuerpos fueron hallados con signos de violencia y disparos en la cabeza, dentro de un coche ubicado junto a un campus de la Universidad de Guanajuato, al sur de la ciudad de Celaya. Lo que pasó antes no se sabe.

La identidad de los muchachos sigue sin revelarse, después de que la Guardia Nacional acudiera sobre las 18.00 al camino de terracería donde se encontraban los cuerpos, en la colonia Primera Fracción de Crespo. Los primeros informes determinaron la edad de los jóvenes, que gracias a un comunicado de la Universidad Latina de México se sabe que eran estudiantes de esta institución, único dato relevante sobre las víctimas que ha salido a la luz. El organismo ha declarado este lunes un día de luto y ha suspendido las clases.

El gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue, condenó este pasado domingo a través de X -antes Twitter- los asesinatos y desplegó un fuerte operativo policial para “dar con los responsables lo antes posible”. El alcalde de Celaya, Javier Mendoza, aludió en un mensaje grabado a la Fiscalía estatal para “llevar ante la Justicia a quienes perpetraron este crimen”. Sin embargo, Guanajuato está entre los 11 Estados con mayor impunidad para los criminales, en un país en el que solo 7 de cada 100 homicidios son esclarecidos, según el portal Impunidad Cero. También es la región más violenta de México. Se cometieron 1.930 asesinatos hasta agosto de este año, según cifras del Gobierno federal.

Los cuerpos de los jóvenes ya se encuentran en las instalaciones del Servicio Médico Forense de Celaya, donde se intentará esclarecer las causas de las muertes. De momento se desconocen las cuestiones básicas: quién, por qué, cómo e, incluso, cuándo. No se sabe durante cuanto tiempo estuvieron los cinco muchachos asesinados dentro del coche junto al campus universitario.

Lo único que se sabe es que el secretario de Gobierno de Guanajuato, Jesús Oviedo, está en contacto con los familiares para “brindar apoyo y acompañamiento”. También que la Fiscalía General de Guanajuato ha acopiado diferentes indicios que están siendo analizados. Una institución desbordada en el Estado más sangriento del México.

Incluso quien denuncia los crímenes también es silenciado a balazos. El activista y abogado Adolfo Enríquez Vanderkam, que exponía a los asesinos y ayudó a resolver casos como el de este domingo en Celaya, fue asesinado el pasado 21 de noviembre mientras cenaba en una taquería de León.

Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS México y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país