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El vendaval contra el machismo en el fútbol femenino encuentra eco en México: “¡Que se vayan los Rubiales, van a caer!”

El Barcelona y el Real Madrid sostienen un par de amistosos contra el América y Tigres para mostrar la solidez del fútbol femenino en ambos países y apoyar a Jenni Hermoso

Luis Rubiales Jenni Hermoso
Los equipos femeninos del Barcelona y América muestran un mensaje de apoyo a Jennifer Hermoso, en el estadio Azteca, este martes.José Méndez (EFE)
Diego Mancera

Las futbolistas están hartas de que un acto machista haya empañado su momento cúspide. El hecho de que España haya ganado su primer Mundial femenino frente a Inglaterra ha quedado relegado por el beso no consentido de Luis Rubiales, presidente de la Federación española de fútbol, a Jenni Hermoso. La cancha ha sido uno de los espacios en el que las jugadoras han mostrado su solidaridad hacia su colega, la 10 de España, la exgoleadora del Barcelona y estrella también en México.

El estadio Azteca, campo que sigue encantado por las glorias de Maradona y Pelé, se entregó al fútbol femenino este martes. Por primera vez, el Barcelona femenino jugó en el mítico recinto futbolero frente al América Femenil, vigentes campeonas del fútbol mexicano. De manera paralela, en el norte de México, las pentacampeonas de Tigres se enfrentaron al Real Madrid, donde milita la mexicana Kenti Robles. Fue una noche de fútbol de mujeres en un momento en el que toda la comunidad de jugadoras se ha fundido en la solidaridad con Hermoso. Antes de ambos partidos amistosos, las futbolistas posaron con un letrero: “Se acabó. ¡No estás sola!”. Desde el vestidor de las mexicanas había una camiseta que decía “Jenni, por ti y por todas”.

“¡Ahora que estamos juntas, ahora que sí nos ven, que se vayan los Rubiales, van a caer, van a caer!” y “¡fuera Rubiales, el machismo ya no cabe!”, lanzaban como cántico las aficionadas de la llamada Barra Feminista, un conjunto de seguidoras del fútbol femenino que intentan quitarle la carga machista, homófoba y peyorativa a las tribunas de su país. Las pancartas en apoyo a Jenni Hermoso se concentraron en el mensaje que Alexia Putellas escribió tras la incendiaria comparecencia de Rubiales: “Se acabó”. Antes del partido, la española Andrea Pereira, hoy futbolista del América, comentó que la crisis en la Federación española era cuestión de tiempo. “Llevábamos mucho tiempo viendo cosas que no debían de ser de una federación. Por fin, con este acontecimiento desagradable, todos han ido a una con la selección y con las mujeres. Eso es positivo, aunque quita foco a lo deportivo. Esto debió pasar mucho antes”, dijo la exjugadora de la Roja.

El beso no consentido de Rubiales a Hermoso desencadenó la indignación global, la cual se acrecentó cuando el federativo se negó a renunciar e hizo un alegato que minó su reputación. Hasta el momento, Rubiales sigue en el cargo. La Fiscalía española inició una investigación al líder de la federación por un posible delito de agresión sexual. La FIFA, a través de la Comisión Disciplinaria, le suspendió de manera provisional durante 90 días. Y en las calles de Madrid, cientos de mujeres salieron a protestar este lunes con consignas como “No es un pico, es una agresión”, en referencia al intento de explicación de Rubiales sobre el beso súbito a Hermoso, mismo que la propia jugadora reprobó al asegurar que no fue respetada y fue “víctima de una agresión”.

Hermoso fue una sorpresa para México cuando dejó al Barcelona para enrolarse con el Pachuca, uno de los clubes que mejor ha invertido en la categoría. El club le brindó una fastuosa bienvenida con mensajes de apoyo de Hugo Sánchez, Rafa Márquez y Hristo Stoichkov. En su primer año, el equipo fue liderado por la española y llegaron a la final de la Liga MX Femenil. Su fulgurante camino al título fue impedido por las futbolistas del América. En México, la dirigencia del fútbol mexicano condenó, sin mencionar a Rubiales, el acto ocurrido tras la final del Mundial pese a ser distantes a otros casos. “Más allá de que el hecho ocurrió fuera de nuestra jurisdicción, es un evento que nos recuerda que no podemos bajar la guardia como sociedad y debemos seguir trabajando para hacer de nuestra Liga un espacio en el que cualquier mujer pueda sentirse segura”, escribieron en un comunicado hace unos días. El fútbol femenino sigue en pie y en defensa de Hermoso.

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Sobre la firma

Diego Mancera
Es coordinador de las portadas web de la edición América en EL PAÍS. También se encarga de informar de historias deportivas de México. Empezó a trabajar en la edición mexicana desde 2016. Es licenciado en Ciencias de la Comunicación y Periodismo por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

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