Vicente Fox: “México no puede seguir sumido en esta carnicería”
"En materia de drogas México le está haciendo la tarea a EE UU", dice el exmandatario en la inauguración del foro sobre cannabis que preside en su rancho de Guanajuato
Vicente Fox asegura que la violencia lo impulsó a convertirse en la cara más mediática de la despenalización de la marihuana en México. "Me duele en el alma ver cada muerte", comenta este jueves en la inauguración del Simposium EEUU - México sobre Legalización y Uso Médico de Cannabis, celebrado en su think tank, el Centro Fox de San Francisco del Rincón (Guanajuato). "México no puede seguir sumido en esta carnicería. Tenemos que salir de esta trampa: es claro que estamos haciendo la tarea a Estados Unidos", dice tajante en su despacho el primer día de foro.
"Aquí el consumo es muy modesto, la producción es muy modesta. Pero estamos en medio de quienes producen en el sur (Colombia, Venezuela, Ecuador, Bolivia) y quienes consumen en el norte. La posición de Estados Unidos es muy cómoda", explica el exmandatario del conservador Partido Acción Nacional (PAN). Además de eso, México se enfrenta a una próxima legalización del uso recreativo del cannabis en la fronteriza California, que crearía situaciones inéditas.
A pesar de su apoyo reciente a la primera marca comercial de marihuana en EE UU (su creador, el exdirectivo de Microsoft Jamen Shively, tiene un papel destacado en el foro) el político insiste en que su conversión en activista no tiene detrás intereses económicos. Eso sí, su pasado como empresario (fue gerente de Coca-Cola) asoma al pasar de las vidas perdidas a las consecuencias económicas. Quienes trabajan para los cárteles "no nacieron criminales", opina. "Simple y sencillamente no tuvieron las oportunidades. Estarían mucho más contentos trabajando para una empresa. Y tendrían prestaciones, y estarían haciendo trabajo legal y no arriesgando la vida todos los días. Pienso en ellos todos los días. Pienso en mi país, en la pérdida de inversión extranjera. Veo cómo a Brasil en seis, ocho años, ya no le vemos ni el polvo… ", asegura.
¿Y por qué el presidente entre 2000 y 2006 no dio un paso firme hacia la legalización durante su mandato? Fox responde que fue "un proceso" que le hizo interesarse por el estudio del problema en el Centro Fox. "En mi caso, por la violencia. Pero, además, el ver que la sociedad evoluciona, que es la última frontera de las prohibiciones... matrimonio entre personas del mismo sexo, aborto... las prohibiciones se han derrumbado una a una. No se han podido sostener. Porque las personas no reaccionamos a las prohibiciones. Reaccionamos a entender el problema, tener información y tomar decisiones con responsabilidad", afirma. Y saca a relucir a Adán y Eva: "¿Qué tal si en lugar de haberles dicho 'este fruto está prohibido sin ninguna explicación les hubieran dicho 'esta manzana tiene gusanos'?".
"Mi razón (para apoyar el debate) es muy sencilla, es ética y es moral. Pedir a las autoridades que salven a nuestros hijos de las drogas es un mito, una ilusión, es algo que no va a suceder. Pedir al Gobierno que haga guerras como la que convocó [Felipe] Calderón para combatir las drogas ya comprobamos que imposible. Usemos la inteligencia, usemos el convencimiento, la información, la educación, la regulación, para que cada una de estas sustancias sea manejada responsablemente por cada ciudadano. Lo importante ahora es abrir un debate serio, profesional, bien documentado", subraya. Y el límite no está en la marihuana. El debate sobre estupefacientes está abierto "para todas las drogas, en todos los lugares y para toda la gente, siempre con una regulación fuerte".
"Estoy muy satisfecho con lo que hice", responde después, repreguntado sobre su gestión. "Si yo hubiera previsto hasta dónde iba a llegar este fenómeno, a causar tantos estragos... Hubiese sido bueno actuar más temprano. Pero eso es historia. Si no actuáramos hoy estaríamos repitiéndola".
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