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El ‘rock n’ roll’ de Iñaki López

El periodista y presentador de ‘La Sexta Noche’ regenta un pequeño sello discográfico de música rockera, estilo musical que ha marcado su vida

DVD 1041 Madrid  17/02/2021

Entrevista al periodista Iñaki López.
Tienda chopper Monster.

Foto: Inma Flores
DVD 1041 Madrid 17/02/2021 Entrevista al periodista Iñaki López. Tienda chopper Monster. Foto: Inma FloresINMA FLORES (EL PAIS)
Sergio C. Fanjul

Hoy en día cualquiera lleva tupé: un futbolista, un hipster, un tronista, un policía. Pero el tupé tiene una fuerte carga semántica, ya disuelta en el marasmo de la posmodernidad. “Los roquetas, que solemos ser talluditos, vemos esto con extrañeza. Y con envidia, porque nuestro colectivo sufre mucha alopecia”, bromea el rockero Iñaki López. No es el caso.

López (Portugalete, 47 años) también es periodista y presenta cada sábado seis horas, como un domador de tertulianos, La Sexta Noche. Si le han visto en la tele con el pelo engominado y la patilla no es casualidad. Fuera de cámara se quita la chaqueta y la corbata y vuelve al ámbito del rock n’ roll: chupa de piel, vaqueros ajustados, cartera con cadena. Lleva en esta secta desde que era chaval, cuando en el colegio, los macarrillas repetidores de octavo de EGB, auténticos greasers, le introdujeron en estos ritmos. “Yo flipaba”, dice. Así conoció a los Stray Cats, a los Meteors, los Polecats, etc. Rock clásico, rockabilly, psychobilly, garage, ska, algo de punk. “Los punkis del Euskadi de los ochenta decían que si una canción duraba más de tres minutos, es que era jazz”, recuerda. Cuarenta años después sigue escuchando lo mismo y vistiendo igual. “No soy ningún ejemplo de evolución”, se ríe.

Tanto es así que López es, junto a Marcos Sendarrubias, cofundador del sello Hot45, dedicado a estos géneros. “El 45 es el número de revoluciones a las que giran nuestros discos, vinilos pequeños, ep’s, solo 500 copias, sin posibilidad de reedición”, explica con entusiasmo, “también la edad a lo que lo montamos”. Entre sus apuestas están artistas como Mike Sánchez and the Limboos, Diego Cruz, La Perra Blanco o el propio Sendarrubias. No es un negocio, porque es ruinoso, pero es un hobby apasionante. “Hay quien se lo gasta en drogas, nosotros en sacar discos”, explica.

En su juventud experimentó la aspereza de la margen izquierda del río Nervión, en Bilbao: reconversión industrial, paro, contaminación, años de plomo del terrorismo, conflicto social, mucha grisura. Se acuerda del peinado de los Eskorbuto, parecido al de MacGyver: los punkis más que con cresta iban en chándal. “La juventud nos dividíamos en tribus urbanas, ahora es todo más uniforme”, cuenta, “los fines de semana había hostias”. La polarización y la precariedad vuelven a nuestro mundo, aunque su superficie esté ahora hiperdiseñada. “Creo que hemos vivido en una arcadia feliz hasta que volvieron las crisis: ahora la política vuelve a estar en el centro de la conversación”, opina, “la tensión del parlamento ha llegado a la calle. Las redes sociales son como un botellón”.

¿Y los medios? ¿Es La Sexta Noche una forma de espectacularizar la política, de colaborar a la crispación? “El formato televisivo siempre busca el espectáculo”, confiesa, “aun así mi labor es conseguir que los tertulianos no se enreden en luchas personales o partidistas, intentar que hablen del tema que se está tratando”. Los minutos de bronca en cada programa, según señala, son pocos dentro esas seis horas, aunque es lo que más trasciende. La tele también es rock n’ roll. “Si algún tertuliano incide en eso, si se dedica a reventar el debate, sabe que acabaremos prescindiendo de él”. Han ganado, recientemente, un premio de la Academia de la Televisión por su apuesta por la tertulia, menos espectacular, de científicos sobre la pandemia. “La actualidad española es brutal, parece obra de guionistas de Netflix”, opina.

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‘LaSexta noche’ es de Iñaki López

El hijo de Iñaki López tiene tres años. Su madre es Andrea Ropero, también periodista de La Sexta (ahora en El Intermedio). Se llama Roke, sobre todo por San Roque, patrón de Portugalete, pero también porque en su onomástica (16 de agosto) murieron Elvis Presley y el bluesman Robert Johnson, que, dicen, vendió su alma al diablo a cambio de ser un prodigioso guitarrista. Pero el rock ya no es la música de la juventud. “Dicen que las guitarras están de capa caída, que son de viejunos, que los jóvenes están por los ritmos electrónicos y urbanos”, se lamenta, “pero el rock siempre ha sido música maldita y siempre vuelve a resurgir: es cíclico”.

Espera a mejores tiempos mientras posa para la foto en la tienda Chopper Monster, un clásico de Malasaña, Madrid, llena de pin ups, monstruos, vinilos, cuero y leopardo. A veces se viene a tomar unas birras con los dueños. “La escena del rock n’ roll está muy viva: vamos a festivales por toda España, comemos bien y tomamos vino, no solo bocatas de supermercado esperando el autobús, como cuando éramos chavales”, dice. ¿Y si Roke sale trapero? “Bueno”, suspira, “le querré igual”.

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Sobre la firma

Sergio C. Fanjul
Sergio C. Fanjul (Oviedo, 1980) es licenciado en Astrofísica y Máster en Periodismo. Tiene varios libros publicados y premios como el Paco Rabal de Periodismo Cultural o el Pablo García Baena de Poesía. Es profesor de escritura, guionista de TV, radiofonista en Poesía o Barbarie y performer poético. Desde 2009 firma columnas y artículos en El País.

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