La guerra entre Casado y Díaz Ayuso amenaza con fracturar el Gobierno de Madrid
Los consejeros del Ejecutivo se posicionan en el conflicto interno con apoyos explícitos y silencios
La guerra civil desatada en el PP por el choque entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso amenaza con fracturar el Gobierno de la líder conservadora en la Comunidad de Madrid. Tras su victoria del 4-M, la baronesa tuvo autonomía para diseñar un Ejecutivo a medida, pero optó por lanzar un mensaje de continuidad en medio de la pandemia. Así, mantuvo a todos los consejeros del PP que habían estado en su gobierno con Ciudadanos, con la excepción de María Eugenia Carballedo, hoy presidenta de la Asamblea. En consecuencia, el Gobierno de Madrid, que tiene nueve consejeros, mantiene la cuota de nombramientos que le correspondió a la dirección nacional de Génova en 2019, lo que ahora le aboca a la fractura: en plena lucha fratricida, los silencios de consejeros de peso como Enrique López o David Pérez suenan más fuerte que las declaraciones públicas en favor de la presidenta.
“Total apoyo a Isabel Díaz Ayuso y completo rechazo a aquellos que con crueldad han intentado eliminarla de la política”, ha escrito en Twitter el portavoz gubernamental y consejero de Educación, Ciencia y Universidades, Enrique Ossorio. “La envidia les ha llevado a cometer la mayor indignidad”, ha acusado. “La familia del PP es noble y tiene principios. No puede aceptar lo sucedido”.
Un mensaje que ha secundado Paloma Martín, la titular de Medioambiente, Vivienda y Agricultura, además de persona de la absoluta confianza de Díaz Ayuso en el Ejecutivo regional, al que llegó tras una llamada de la presidenta que le hizo abandonar una consultoría. “El proyecto político de Díaz Ayuso es el que representa a la mayoría de los ciudadanos. Medidas liberales que generan ilusión, confianza y prosperidad en nuestra región. Con Ayuso vamos a seguir trabajando por todos los madrileños”, ha escrito.
Total apoyo a @IdiazAyuso y completo rechazo a aquellos que con crueldad han intentado eliminarla de la política. La envidia les ha llevado a cometer la mayor indignidad. La familia del PP es noble y tiene principios. No puede aceptar lo sucedido. #YoConAyuso pic.twitter.com/SnIaqtT7WS
— Enrique Ossorio (@eossoriocrespo) February 17, 2022
“Nuestro trabajo ha sido honrado siempre”, ha defendido por su parte Enrique Ruiz-Escudero, el titular de Sanidad, afectado de pleno por el conflicto, puesto que su consejería es la que impulsó el contrato en el origen de toda la polémica, y por el que habría cobrado una comisión el hermano de Díaz Ayuso.
En la misma línea se ha expresado, a su manera, un consejero que resume con su posicionamiento lo divisivo que está resultando para el PP el enfrentamiento entre sus dos principales figuras: Javier Fernández-Lasquetty, que fuera jefe de gabinete de Casado, y que hoy es consejero de Economía, Hacienda y Empleo, simplemente ha publicado en su LinkedIn una fotografía de Díaz Ayuso con la leyenda “#yoconAyuso”.
Silencios y esperas
Las redes sociales se han convertido estas últimas horas en un campo de batalla más de la guerra por el poder en el PP. Uno tras otro se han posicionado los políticos de los dos bandos, en la Asamblea y el Congreso, en Sol y en Génova. Incluso ha tomado partido Marta Rivera de la Cruz, titular de Cultura, Turismo y Deporte tras ser rescatada por Díaz Ayuso del naufragio de Ciudadanos (“Quiero hacer llegar a la presidenta del Gobierno de Madrid, del que soy miembro, todo mi afecto, mi apoyo y mi confianza”).
Pero no todos los consejeros se han manifestado. Han guardado silencio los que otean el horizonte en búsqueda de una señal que les indique quién ganará la guerra, o aquellos que ocupan una posición incómoda, con un pie en un bando y otro en el opuesto, jugándose la supervivencia y el futuro.
Es el caso de Enrique López, de facto número dos del Gobierno de Madrid, pues es consejero de Justicia, Interior y Presidencia, y que al mismo tiempo es vicesecretario de Justicia en el organigrama de Casado. Con responsabilidades en los dos bandos, el exmagistrado del Tribunal Constitucional no ha dicho nada en público sobre el conflicto que sacude al PP.
Tampoco se ha pronunciado David Pérez, consejero de Transportes, al que siempre se ha visto como próximo a Génova, y que tuvo que luchar para hacerse un hueco de su gusto en el primer Ejecutivo de Díaz Ayuso, allá por 2019. Una herida nunca del todo cerrada para un político veterano y con trienios de gestión a sus espaldas.
Carlos Izquierdo, consejero de Administración Local y Digitalización, clave en la campaña electoral de Díaz Ayuso para el 4-M, ya presente en Ejecutivos anteriores, e incrustado en la estructura orgánica del PP, y Concepción Dancausa, titular de Familia, Juventud y Política Social, han optado por el silencio.
Preguntado por este diario, Izquierdo especificó que vivía la situación “con normalidad”, y se dijo enfrascado en el pleno de la Asamblea durante toda la jornada. El resto de los consejeros no aclararon las razones de su silencio cuando sus equipos fueron preguntados.
López y Pérez ya habían dejado anteriormente señales de su proximidad a Génova. En el inicio del conflicto por el control del PP de Madrid, y con Díaz Ayuso y sus portavoces oficiales abogando una y otra vez en público por celebrar cuanto antes el congreso del partido, los dos se mostraron prudentes. Comedidos, y poco entusiastas. De alguna manera, secundaron el “ahora no toca” de Casado, que desde el principio de las tensiones con Díaz Ayuso defendió que el choque estaba despistando al PP de su labor de oposición al Gobierno de Pedro Sánchez.
Esa misión principal de la formación conservadora es hoy como el horizonte: si hay alguien en el partido que aún lo persigue, no lo alcanzará, porque la organización al completo se ha abierto en canal, dividiéndose entre casadistas y ayusistas mientras se dirime la guerra por el poder. Una división a la que no es ajeno el Gobierno de la Comunidad de Madrid.
Suscríbete aquí a nuestra newsletter diaria sobre Madrid.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.