Los madrileños que reciben comida del Ayuntamiento suben un 25% durante la pandemia

El número de madrileños a los que ofrecen ayuda alimentaria cada día los Servicios Sociales del Ayuntamiento se ha elevado a 88.000, unos 6.000 más que hace un mes. El 25% de ellos, es decir 22.000, son personas golpeadas por la crisis de la pandemia y que se han dado de alta en esos Servicios Sociales en los últimos tres meses. Son cifras ofrecidas por la vicealcaldesa Begoña Villacís en la rueda de prensa posterior al consejo de Gobierno de este jueves. “Gran parte” de estas nuevas ayudas se prestan a personas afectadas por los ERTEs y algunos de ellos necesitan recibir comida por parte de los servicios municipales porque todavía no han cobrado las prestaciones a las que tienen derecho, según la vicealcaldesa. “No deberían estar en nuestra cola sino en la del Estado”, ha advertido Villacís, de Ciudadanos.

La plantilla municipal de los Servicios Sociales, según datos de la Junta de Gobierno, ha aumentado durante el estado de alarma en 264 personas de las que 85 son plazas fijas, 159 son contratos temporales de seis meses prorrogables a tres años y 20 van destinados a cubrir plazas vacantes. De este Plan de Empleo Temporal, 118 son trabajadores sociales y 41 auxiliares. Puente de Vallecas, con 15, es el distrito con mayor número de nuevas incorporaciones. La inversión para hacer frente a este aumento del personal, que el Ayuntamiento califica en una nota de prensa de “refuerzo histórico”, es de cinco millones de euros.

Ya hace un mes el Consistorio informó de que distribuía alimentos a 81.677 personas pertenecientes a 30.043 familias. A esa cifra hay que unir los 20.265 de 5.828 familias a las que llega comida sin pasar por los canales oficiales, según un balance elaborado entre el 15 de marzo y el 30 de abril por la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM).

Begoña Villacís aprovechó su referencia este jueves al aumento de las ayudas en Servicios Sociales para reclamar una vez más al Ejecutivo de Pedro Sánchez los 420 millones de superávit que corresponden al Ayuntamiento de Madrid y que quieren emplear en hacer frente a la crisis social y económica resultante de la pandemia.

El propio Ayuntamiento reconoce, y ayer lo recordaba la vicealcaldesa, que los Servicios Sociales ya recibieron mermados de efectivos y recursos el golpe que ha supuesto el coronavirus. Solo el mes de marzo se solicitaron más de 33.000 ayudas, un caudal similar a todo el del año 2019. En total no llegan a 500 los trabajadores sociales del Ayuntamiento que, de manera efectiva, han estado plantando cara a la pandemia en los 21 distritos.

La ratio que el Consistorio considera adecuada es de un trabajador social por cada 6.000 ciudadanos. Hoy en día esa ratio se acerca a los 7.000. El colectivo se ha sentido olvidado y denunció en un manifiesto el mes pasado que la ayuda se ha estado volcando esencialmente en el frente sanitario. Aseguraban que desarrollar su labor “es inasumible con la escasa dotación de recursos humanos de los que disponemos en los centros de servicios sociales, debido a lo cual no se está pudiendo dar una respuesta adecuada a las situaciones de emergencia que se presentan”.