La Justicia condena a Vox por vulnerar los derechos de sus diputados en un caso similar al de Baleares

La Justicia ha condenado a Vox por vulnerar los derechos fundamentales de asociación y participación política de sus diputados en un caso acaecido en 2020 en Murcia que, según el propio partido ultra, tiene “paralelismo” con el protagonizado el lunes por cinco de sus parlamentarios en Baleares, expulsados de la formación por echar del grupo a la presidenta provincial y al presidente de la Cámara autonómica, abriendo una grave crisis interna.

El pasado 16 de enero, la Audiencia Provincial de Murcia desestimó el recurso presentado por Vox contra la sentencia dictada en enero de 2022 por un juzgado de Cartagena que le condenaba a readmitir a los diputados autonómicos Juan José Liarte, Mabel Campuzano y Francisco Carrera, que fueron expulsados del partido en junio de 2020 por retirar a la dirección nacional los poderes para disponer de los fondos que la Asamblea de Murcia pagaba al grupo parlamentario para garantizar su funcionamiento y por despedir a asesores pagados con dinero público que en realidad trabajarían para el partido.

El pasado lunes, tras anunciar que iba a proponer al Comité de Garantías de Vox la “expulsión cautelar inmediata de estos cinco sujetos”, en alusión a los diputados rebeldes de Baleares, el secretario general del partido, Ignacio Garriga, aseguró que existía un “pequeño paralelismo” entre este caso y el que se produjo en la anterior legislatura en la Asamblea murciana. “Hubo [en Murcia] unos diputados díscolos que decidieron irse, pero hubo personas comprometidas con las ideas que siguieron dando la batalla contra viento y marea, incluso contra aquellos que decían que eran de Vox y se movieron por intereses personales, y el resultado fue tiempo después que más personas están confiando en Vox y que Vox está condicionando el Gobierno de Murcia desde la Vicepresidencia”, afirmó, en alusión al número dos del Ejecutivo regional de coalición entre si partido y el PP, José Ángel Antelo.

En realidad, los tres diputados murcianos no se fueron del partido, sino que los expulsó el Comité de Garantías de Vox en una decisión que la Justicia ha considerado ahora ilegal, por lo que obliga a readmitirlos. Según la sentencia de la Audiencia Provincial de Murcia, la revocación de los poderes sobre las cuentas del grupo y el despido de asesores no podían constituir falta alguna, ya que responden a lo previsto en el reglamento de la asamblea regional. Respecto a las demás faltas atribuidas a los críticos –irregularidades contables, filtraciones a la prensa--, la sentencia concluye que las acusaciones del Comité de Garantías de Vox se basaron en meras conjeturas.

La sentencia no solo condena a Vox a readmitir a los tres exdiputados —dejaron su escaño al acabar la anterior legislatura autonómica, en mayo pasado—, sino que también anula las elecciones primarias al Comité Ejecutivo Provincial (CEP) celebradas pocos meses después, que ganó el actual vicepresidente murciano y a las que no se permitió presentarse a los críticos. Pese a ello, los entonces sancionados ya han señalado que no tienen intención alguna de regresar al partido. Respecto a la repetición de las elecciones primarias, resulta inviable, ya que la dirección nacional de Vox cambió los estatutos para suprimirlas y los comités provinciales se designan ahora a dedo desde Madrid. Así, el valor del fallo es meramente testimonial pues el tribunal ha rechazado la pretensión de dos de los expulsados de que Vox les compense económicamente por el daño moral sufrido.

En el caso de Baleares, las causas de la expulsión de los cinco diputados son diferentes, pero el funcionamiento del partido tiene semejanzas: Vox los ha expulsado cautelarmente por un procedimiento sumarísimo antes siquiera de tomarles declaración y escuchar sus argumentos. Hay otro paralelismo: la presidenta balear, la popular Marga Prohens, puede completar mayoría absoluta en la Cámara autonómica pactando con los cinco diputados díscolos de Vox y relegar así a la irrelevancia al partido de Abascal. Es lo que hizo el presidente murciano, Fernando López Miras, con los tres díscolos de Vox frente a la moción de censura de PSOE y Ciudadanos.

La portavoz del grupo ultra en el Congreso, Pepa Millán, ha negado este martes que haya una crisis en Vox y ha asegurado que las informaciones difundidas por los medios son “falsas”. Pese a ello, ha reconocido que “desgraciadamente” su formación atraviesa en Baleares “por una situación absolutamente dantesca”.