El programa marco del PP para el 28-M soslaya los charcos ideológicos para pescar en el centro

En la presentación del programa marco del PP para el 28 de mayo, este domingo, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, retó a los votantes de otros partidos a encontrar discrepancias ideológicas con sus compromisos electorales. “A cualquier persona que haya votado a otro partido: ¿qué parte de este programa no te gusta?”, desafió Feijóo, consciente de que el documento evita los charcos ideológicos porque está ideado para pescar en el electorado más centrista, donde se sitúa la mayoría de la población española. “Este es un programa que desborda al PP”, defendió el líder popular, antes de comprometerse a cumplirlo íntegramente. “Cada palabra, cada tiempo verbal, cada calificativo está pensado. Y está pensado para cumplirlo”, reafirmó. El jefe de los conservadores tiene más sencillo comprometerse a cumplir cada palabra de un texto que está construido con escasa concreción. El programa del PP elude además referirse al aborto y prescinde de la propuesta de la lista más votada.

Más bajadas de impuestos sin concretar. La parte más ideológica del texto es la fiscal, donde el PP insiste en una política de reducción de la carga impositiva, aunque “siempre dentro de un marco de estabilidad presupuestaria y de cuentas públicas sostenibles”. El PP se compromete a “proseguir con la reducción del impuesto de bienes inmuebles”, sin mayor concreción, así como a seguir deflactando la tarifa del IRPF “tan pronto como exista la posibilidad legal, pensando sobre todo en rentas medias y bajas”, sin precisar desde qué tramos de renta. El PP habla también de instaurar bonificaciones en el impuesto de vehículos de tracción mecánica, por clase de carburante y características de los motores y su incidencia en el medio ambiente ―pero no dice cuáles―; así como para el impuesto de actividades económicas para las empresas con pérdidas, como para las que incrementen el promedio de contratos indefinidos y las que instalen sistemas de energías renovables. Los populares se comprometen también a “avanzar” en la reducción del impuesto de sucesiones y donaciones y el de patrimonio, de forma genérica.

“Equilibrio” en las lenguas. El PP asegura que garantizará el derecho a la educación en castellano y en el resto de lenguas cooficiales en las comunidades autónomas “bajo el principio de equilibrio”. El PP no precisa qué haría con sistemas como el de la enseñanza en Cataluña, de inmersión lingüística en catalán. Los populares plantean un “plan de lenguas” que “favorezca fórmulas que fomenten el respeto mutuo y el conocimiento de todas las lenguas cooficiales”.

Cumplimiento íntegro del pacto contra la violencia machista. El PP incluye en el programa que “debe desarrollarse el Pacto de Estado [contra la violencia de género] de forma completa”, lo que puede suponer un problema en caso de que los populares tengan que pactar con Vox en algunos territorios, ya que la extrema derecha niega la existencia de la violencia machista y es el único partido que no ha suscrito ese acuerdo de Estado. El PP también reafirma su compromiso con la “lucha contra el cambio climático”, otra discrepancia ideológica con Vox, de tendencia negacionista.

Silencio sobre el aborto y sobre la lista más votada. En las 112 páginas del programa, el PP evita toda referencia al aborto, mientras solo habla de políticas de fomento de la natalidad. Aunque la normativa sobre la interrupción voluntaria del embarazo es estatal, los Gobiernos de las comunidades autónomas pueden influir en la ejecución de esta a partir de sus competencias en Sanidad. En el único Gobierno conjunto del PP con Vox, el de Castilla y León, los socios han mantenido recientemente una agria polémica por el intento del partido de Santiago Abascal de coaccionar a las mujeres que quisieran abortar obligándolas a escuchar el latido fetal, una medida que el PP echó atrás en medio de una fuerte polémica.

El PP tampoco ha incluido en su programa electoral la propuesta anunciada por Feijóo para que gobierne la lista más votada. Aunque esta medida requeriría la reforma de una ley estatal ―la LOREG― afecta de manera directa al menos a los Ayuntamientos, según el plan institucional que el líder del PP presentó hace semanas en Cádiz. Los populares la han excluido de sus compromisos electorales para las municipales de mayo.

Pactos de Estado ante materias complejas. El programa plantea varios pactos de Estado sobre asuntos en los que el PP evita definirse, como el del agua, ante la disputa entre distintos territorios por los trasvases; y la inmigración, un tema en el que los populares reciben mucha presión de Vox. En el texto, el PP defiende los “flujos migratorios regulares vinculados al mercado laboral que, lejos de ser un problema, son fuente de riqueza económica, cultural y social”, a la vez que apuesta por hacer efectivo “el retorno de inmigrantes en situación administrativa irregular”.