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Lágrimas y “orgullo” de ser del PP en el juicio de Gürtel

Dos cargos públicos del partido en Boadilla niegan su implicación en la trama

El exconcejal José Francisco Pastor de Luz, durante su declaración este jueves en la Audiencia Nacional.
J. J. Gálvez

José Francisco Pastor, exconcejal del PP en Boadilla del Monte y exgerente del Patronato de Cultura, no ha podido reprimir las lágrimas en la sexta sesión del tercer gran juicio al PP por la trama Gürtel, que se celebra desde la pasada semana en la Audiencia Nacional. Este jueves, durante su interrogatorio, el exedil ha defendido su inocencia y ha negado su implicación en los sucios negocios de la trama en la localidad madrileña, por los que la Fiscalía le pide una pena de dos años y seis meses de cárcel: “Yo he ocupado honradamente esos cargos. Y, además, orgulloso de haber pertenecido al Partido Popular. Que quede bien claro”.

De las 24 personas sentadas en el banquillo, 17 ya han confesado. Sin embargo, los siete restantes rechazan los hechos que les atribuye el ministerio público, que mantiene que la trama anidó en el Ayuntamiento de Boadilla con el beneplácito de diferentes cargos públicos y, desde allí, manipularon contratos para conceder proyectos a empresas que pagaban mordidas. Parte de ese dinero, además, se usó presuntamente para costear eventos electorales del PP. A Pastor, por ejemplo, se le acusa de fraccionar las facturas de un “acto concierto clausura del ciclo homenaje a Luigi Boccherini”, adjudicado a empresas vinculadas al líder de Gürtel, Francisco Correa. Pero el exconcejal ha negado este jueves que se saltase la ley y que recibiera algún tipo de “prebenda” de la red corrupta.

Visiblemente emocionado, el exedil ha cargado también contra otros acusados: “Aquí ha habido afirmaciones de excompañeros del PP que dejan en vergüenza a miles de afiliados que nos hemos dedicado honradamente al partido”, ha insistido Pastor, en referencia a quienes han ofrecido, durante las sesiones anteriores, profusos detalles de su participación en los tejemanejes de la trama. Entre ellos, el propio exalcalde de Boadilla, Arturo González Panero, que ocupó el cargo desde 1999 a 2009; Alfonso Bosch, exdiputado popular; y César Tomás Martín Morales, exgerente de la Empresa Municipal de Suelo y Vivienda (EMSV) y director de campañas del PP local.

“He sentido bochorno de ver cómo excompañeros decían cosas gravísimas”, ha añadido Pastor, que ha asegurado que Panero lo sacó de las listas electorales porque no era uno de los ediles “afines a Correa”. “Hay una declaración, la de Tomás, en la que dice que por ‘obediencia debida’ debíamos contratar con sus empresas y para conseguir pases a congresos del PP. Eso es falso. Muchos de nosotros hemos ido a trabajar al PP y a los congresos con nuestros autobuses y nuestras familias, haciendo de guardas jurados en las puertas y ayudando a que nuestros ideales fueran con nuestro partido. Y no ha sido a cambio de que nos colocaran delante en un congreso”, ha remachado.

Antes de Pastor, ha desfilado ante el tribunal el exconcejal Juan Jesús Siguero, que también niega su participación en la trama y que sustituyó a Panero en la alcaldía tras el estallido del caso Gürtel. “Yo no tenía conocimiento de todo esto hasta que salta Gürtel en 2009. No lo sospeché en ningún momento”, ha declarado, antes de explicar que fue la dirección del PP la que le comunicó que asumiera el bastón de mando: “Te dicen desde el partido que debes ser alcalde… Fue un marrón, un caramelo envenenado”. “Yo no tenía ni voz ni voto en las campañas”, ha proseguido Siguero, que fue tesorero de la formación en Boadilla: “Pero me limitaba a girar los recibos mensuales a los afiliados y a pagar los gastos corrientes de la sede. Nada relacionado con la campaña”.

Carlos Jorge Martínez Massa, durante el interrogatorio de este jueves.
Carlos Jorge Martínez Massa, durante el interrogatorio de este jueves.
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La cuenta del expresidente de L’Oréal

La jornada de este jueves también ha dejado la declaración de Carlos Jorge Martínez Massa, quien fuera presidente de L’Oréal en España y para quien la Fiscalía pide cinco años de cárcel por delitos de fraude a las administraciones públicas y blanqueo. Según el ministerio público, el empresario se benefició de la adjudicación de una parcela a través de una de sus sociedades, de la que era gestor junto a Ramón Blanco Balín, asesor fiscal de la trama. Martínez Massa ha negado esas imputaciones, pero ha admitido que tuvo una cuenta en Suiza “fuera del control” de Hacienda, que después regularizaría.

“Cosa que no me llena de orgullo”, ha afirmado el acusado, antes de contar que la usó para pagar 90.000 euros “en b” para comprar un apartamento en la provincia de Málaga mediante una transferencia a una compañía de Pablo Crespo, número dos de Gürtel. “¿Quién le dio este número de cuenta?”, ha preguntado su abogado. “Ramón Blanco”, ha sentenciado Massa, que ha asegurado que no conocía al resto de acusados. “No he visto a estos señores en mi vida. A ninguno en ningún momento. Y no solamente es que no los conocía, sino que no sabía quiénes eran”.

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Sobre la firma

J. J. Gálvez
Redactor de Tribunales de la sección de Nacional de EL PAÍS, donde trabaja desde 2014 y donde también ha cubierto información sobre Inmigración y Política. Antes ha escrito en medios como Diario de Sevilla, Europa Sur, Diario de Cádiz o ADN.es.

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