La Audiencia Nacional rechaza poner en libertad al ‘Pollo’ Carvajal por el “elevado riesgo de fuga”

La Audiencia Nacional ha rechazado este martes la solicitud presentada por el que fuera jefe de la contrainteligencia militar venezolana hasta 2014, Hugo Armando Carvajal, más conocido como El Pollo Carvajal, de quedar en libertad provisional con medidas cautelares mientras se resuelve su solicitud de asilo y protección internacional presentada ante el Ministerio del Interior para evitar su entrega a EE UU, que lo reclama para juzgarlo por narcotráfico. Para los tres magistrados de la Sección Tercera de la Sala de Penal existe “un elevado riesgo” de que el que fuera alto cargo de los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro vuelva a fugarse, tras recordar que ya lo hizo en 2019, poco antes de que se materializara su entrega a las autoridades estadounidenses, y que solo volvió a estar a disposición de la justicia tras ser detenido el pasado 9 de septiembre en el piso de Madrid en el que se ocultaba. Desde su arresto, el Pollo Carvajal ha abierto hasta tres frentes legales para evitar su entrega a la justicia de EE UU.

En su auto, los magistrados destacan que el exmilitar venezolano “no solo no se presentó” ante el tribunal una vez que, en noviembre de 2019, la Audiencia Nacional decretó su ingreso en prisión para proceder a su extradición, sino que permaneció “escondido” hasta que la policía española descubrió recientemente su paradero y lo arrestó. “Ha existido una auténtica fuga desde el momento en que no ha estado a disposición judicial, independientemente de que no haya salido de España, lo que conlleva la necesidad de mantener su situación actual de prisión una vez ya resuelta judicial y gubernativamente la extradición y solo pendiente de materializar con la firmeza de la denegación de asilo y protección internacional”, señala el auto de la sala. Los magistrados añaden que, por tanto, la prisión incondicional está justificada “para asegurar el mantenimiento del procedimiento de extradición y, en su caso, la entrega a Estados Unidos. La suspensión de esta materialización es, aún legítima, una maniobra más de dilatar la extradición, que en manera alguna puede favorecer a un prófugo como lo ha sido el reclamado Hugo Armando Carvajal Barrios”, advierte el texto.

Desde su detención el pasado 9 de septiembre, el Pollo Carvajal ha puesto en marcha una batería de maniobras legales para evitar su entrega a EE UU. Al reabrirse el proceso de extradición tras su reciente arresto, la defensa del exmilitar venezolano recurrió la resolución de la Oficina de Asilo y Refugio, dependiente del Ministerio de Interior, en la que esta le denegó, en septiembre de 2019, la protección internacional. En este sentido, en el auto conocido este martes, el tribunal recuerda que la Audiencia Nacional ya acordó suspender la extradición hasta la resolución definitiva de este expediente. No obstante, la abogada de Carvajal ya ha anunciado que, en caso de que Interior reafirme su negativa a concederle el asilo, recurrirá esta decisión ante la Sala de lo Contencioso Administrativo de la Audiencia Nacional e, incluso, mostró su disposición a continuar pleiteando ante Tribunal Constitucional y el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo.

En su intento por frenar su entrega a Estados Unidos, Carvajal también ha recurrido todas las resoluciones que han recaído en su contra, tanto en la Audiencia Nacional como en el Tribunal Supremo. El alto tribunal tiene previsto deliberar en las próximas semanas sobre la impugnación planteada por el exmilitar al acuerdo del Consejo de Ministros que, el 3 de marzo de 2020, aprobó su entrega para ser juzgado en el distrito sur de Nueva York. Mientras la Sala de lo Contencioso-administrativo decide si admite o no el recurso, Carvajal ha tratado, en dos ocasiones, de que los magistrados suspendan la entrega de forma cautelar. En el primer escrito presentado ante el Supremo, el exgeneral amparó su petición en que la “única finalidad” de Estados Unidos al solicitar su extradición era someterle “a tortura” con el fin “de obtener información sobre el régimen imperante en la República Bolivariana de Venezuela”. El tribunal rechazó la medida cautelar en mayo de 2020. Cuando el tribunal dictó esa resolución, el exmilitar estaba en paradero desconocido. Tras ingresar de nuevo en prisión, Carvajal ha vuelto a probar suerte en la Sala de lo Contencioso y ha solicitado de nuevo la suspensión cautelar de su entrega. El tribunal todavía no ha decidido.

Finalmente, Carvajal ha intentado que la justicia española le considere testigo protegido. Así, tras su primera detención, en abril de 2019, el exminitar venezolano anunció su intención de ofrecer a la justicia española información relevante sobre los supuestos vínculos del régimen chavista con el grupo terrorista libanés Hezbolá. Un juez de la Audiencia Nacional abrió una causa que declaró secreta y lo llamó a declarar, pero en el último momento el Pollo Carvajal se negó a hacerlo y se archivó la causa. Tras su reciente arresto, el exgeneral volvió a mostrar su intención de declarar. Lo hizo el pasado 20 de septiembre bajo secreto y durante hora y media. Según fuentes jurídicas, en la comparecencia, anunció que aportaría a la causa “documentos importantes”.