Carmen Calvo: “En Meirás el visitante se encontrará con la presencia de Franco, pero con la verdad de lo ocurrido”

El pazo de Meirás reabrirá sus puertas a las visitas “en cinco o seis semanas”, ha anunciado esta tarde la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, en la víspera del día “histórico para esta tierra y para España” en que los Franco devolverán al Estado el palacete. Este acto de entrega, logrado tras la batalla judicial emprendida por el Gobierno en julio de 2019, “dignifica la democracia española y la memoria de este país” y “en parte ha sido empujado por el activismo de mucha gente”, ha recordado la ministra, “miles y miles de hombres y mujeres que han pedido que este lugar sea patrimonio público”. Cuando “se reactiven las visitas”, ha subrayado Calvo, y el público “vuelva a entrar en el pazo de Meirás” se encontrará “con la historia y la verdad de lo ocurrido: Con la presencia de Franco allí, pero con una mirada propia de la memoria democratica y del relato democrático”.

Después de 82 años en manos de los Franco, primero como residencia oficial y después como privada, el pazo de Meirás será entregado este jueves por los abogados de los herederos del dictador en ejecución provisional de la sentencia, de momento recurrida, que otorga la titularidad de la mansión al Estado. A la reunión de hoy, convocada por Carmen Calvo, ministra de Memoria Democrática, en la Delegación del Gobierno en Galicia han asistido el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo (PP); el de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso (PSdeG-PSOE), y los alcaldes de Sada, la localidad en la que se enclava el palacete, Benito Portela (Sadamaioría) y A Coruña, Inés Rey (PSdeG-PSOE). Cada uno de ellos presentó su propuesta ante el debate que se abre ahora: el de a quién corresponderá la gestión y cuáles deben ser los usos que en adelante tendrá el pazo. Entre estos, las distintas administraciones han propuesto que el lugar se convierta en símbolo del expolio de la dictadura y la reparación de las víctimas, y también que regrese a su sentido original como escenario ideado por su primera moradora, Emilia Pardo Bazán, para la creación literaria.

“Tenemos una sentencia muy fundada pero tenemos que seguir trabajando para que sea firme con el último pronunciamiento de la justicia”, ha reconocido Calvo tras la reunión, que calificó de “muy constructiva y de buen ambiente”. “Hemos determinado encontrarnos en alguna fórmula jurídica que nos permita durante todo este tiempo, hasta que se pronuncie la justicia, ser capaces de sacar adelante lo mas importante”, ha continuado: “La preservación y conservación del lugar”. La semana que viene tendrá lugar ya la primera “reunión de trabajo” entre técnicos para concretar la participación de las administraciones. “Esto nos concierne a todos”, ha insistido la vicepresidenta, “el pazo no puede convertirse de ninguna manera en un lugar de recordatorio nostálgico o blanqueamiento del franquismo”. El nuevo Meirás, cuya gestión estaba hasta ahora en manos de la Fundación Francisco Franco, “contará la verdad del paso del dictador por él”, ha avanzado Calvo. “Pero sobre todo hará una reivindicacion de la figura, tan importante para Galicia y las letras españolas, de Emilia Pardo Bazán”, ha añadido: “Esto nos importa mucho, porque será el mejor activo de futuro de este lugar”.

La ministra se ha referido a Meirás como “un patrimonio que por fin va a ser propiedad pública de los españoles y particularmente de los gallegos”. Pocas horas antes de acudir a la cita, el presidente gallego reveló que había escrito al jefe del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, para proponerle el traspaso de la propiedad del inmueble a la comunidad autónoma. Supuestamente, esto solo podrá ocurrir cuando la sentencia sea firme. “Lo razonable”, dijo Feijóo, sería que “una vez que finalice el pleito, Patrimonio del Estado transfiera la titularidad al conjunto de los gallegos”. “Agradecemos que el Estado activase la acción reivindicatoria de la propiedad”, reconoció el líder del PP en Galicia, “pero solicitamos la transferencia porque este era un pazo de una familia gallega y fue comprado con aportaciones de gallegos. Además, también, porque sabemos lo que queremos hacer” con él.

“Un lugar de creación corrompido por el franquismo”

En los días previos a la reunión, de lo que se hablaba claramente era solo de transferir la gestión. El primero en pedir un “convenio” entre Administraciones para asumir el destino de Meirás fue, nada más conocerse la sentencia de septiembre que reconocía al Estado como legítimo dueño, el regidor local de Sada. Benito Portela volvió a recordar el viernes pasado que el Ayuntamiento “está dispuesto a asumir la gestión conveniada de la apertura y visitas del pazo, tal y como lleva reivindicando desde hace años”. Portela propone que en estas visitas guiadas se hable, “además del propio inmueble, del proceso de detentación” del dictador. Las Torres, “como sitio histórico, deben ser un lugar de memoria histórica democrática”, reclama, un santuario en el que tengan cabida tanto la historia del pazo construido por Emilia Pardo Bazán, “su vida y obra”, como aquellos capítulos referidos a “lo que fue el franquismo”. “Estoy seguro de que a la mayor brevedad posible el pazo de Meirás abrirá sus puertas a la ciudadanía”, ha dicho además el alcalde en los últimos días.

La Xunta de Galicia también reclamó el mes pasado, “formalmente”, la “gestión” al Estado con el respaldo del Parlamento autonómico. Su plan de uso pasa por resucitar el espíritu con el que la primera propietaria, la condesa de Pardo Bazán, mandó edificar esa mansión llena de símbolos literarios, que recuerda por sus torres a un castillo medieval. “El pazo es la ensoñación personal de doña Emilia”, proclamaba estos días el consejero de Cultura del Gobierno gallego, Román Rodríguez, “ella, pionera del feminismo, lo pensó e ideó para la creación literaria”. Según este representante de la Xunta, el pazo es “un lugar de creación corrompido por el franquismo, y debe convertirse en faro de la igualdad” y símbolo de la “fuerza creativa de la mujer”, “sin obviar en ningún momento que allí vivió un dictador”.

La Xunta asegura trabajar ya en “un plan de usos” del que, según anuncia Rodríguez, “debe ser partícipe toda la sociedad que tenga algo que decir” sobre Meirás. Las Administraciones, concluye el consejero de Cultura, “deben trabajar conjuntamente” en Meirás para hacer de él un “lugar de convivencia, abierto a la ciudadanía”. Pero la gestión, reivindica, debe ser desde Galicia porque “los gallegos fueron quienes compraron el pazo para el dictador y fue Galicia la que impulsó su recuperación” pública, ahora en manos del Estado.

Entrega de llaves en la Torre de la Quimera

La estancia favorita de Emilia Pardo Bazán es el lugar elegido para la firma del documento y la entrega de llaves con las que la Abogacía del Estado recibirá, en acto judicial, la propiedad de Meirás mañana en torno a las 12.30 horas. La escritora ubicó el corazón de su biblioteca en este lugar, situado en la tercera planta de la Torre de la Quimera (bautizada por ella misma como una de sus obras), con el Balcón de las Musas mirando al jardín. Esta parte del inmueble fue una de las más castigadas durante el incendio que sufrió el pazo en 1978, meses antes de aprobarse la Constitución. Los letrados que impulsaron en el verano de 2019 la demanda civil que ha desembocado en la devolución del palacete al pueblo estarán encabezados por Consuelo Castro Rey, la abogada general del Estado, que asistirá al acontecimiento histórico acompañada por la subsecretaria de Hacienda, María del Pilar Paneque.

Pero en realidad la comitiva judicial llegará al lugar una hora y media antes, a las 11, acompañada del equipo de técnicos de la Xunta que elaboró el inventario con los 697 bienes que los Franco no pueden mover del lugar. La magistrada Marta Canales, titular del juzgado de Primera Instancia 1 de A Coruña, ha ordenado que los peritos revisen los jardines y las habitaciones para “verificar que los bienes están en el mismo estado que cuando se hizo la inspección ocular, el 11 de noviembre”.