Los mejores ‘kits’ de blanqueamiento dental

La higiene bucal es totalmente necesaria para mantener unos dientes sanos y fuertes. No obstante, la limpieza diaria no asegura tener unos dientes excesivamente blancos, ya que son muchos los alimentos y hábitos (tomar café, el tabaco…) que provocan que vayan tomando un color amarillento con el paso del tiempo.

De este modo, son muchos los que buscan un tratamiento específico para tener los dientes más blancos. Sin embargo, y aunque lo más habitual es asistir a una clínica dental, también se puede realizar en casa si se dispone de un presupuesto más ajustado. Estos kits permiten conseguir un tono más blanco en los dientes de forma sencilla y en pocas semanas. Y lo más importante, en el listado de sus ingredientes no aparece el peróxido de hidrogeno en más altas de las permitidas: la comercialización de productos con más del 0,1% de este compuesto químico encargado de blanquear los dientes está prohibida por la legislación europea.

Con moldes individuales: iWhite Superior

Para quién es: para los que no necesitan mucho blanqueamiento.

Por qué lo recomendamos: antes de utilizarlo, es importante cepillarse los dientes y enjuagarse bien la boca para no dejar ningún rastro de comida entre ellos. En el paquete, que promete un blanqueamiento de hasta ocho tonos, incluye diez moldes dentales en forma de férula que vienen cargados de flúor, microperlas de calcio y ácido ftalimidoperoxidopropanoico (PAP). Este último funciona como el principal blanqueante, además de evitar el crecimiento bacteriano. Los moldes, que vienen en paquetes individuales, se pueden colocar de forma simultánea en la parte superior e inferior de la boca.

La primera vez que se usa es recomendable seguir las instrucciones al dedillo: hay que apretar suavemente sobre los dientes para que se quede bien fijado y los productos que se encuentran en el interior del molde se adhieran bien. También es importante no morder en exceso para evitar que el producto se salga del molde, algo que tampoco resulta desagradable en cuanto a sabor. Una vez colocados, hay que esperar unos 20 minutos antes de retirarlos. Durante el tiempo que los tuve puestos, resultaron un poco incómodos porque se genera mucha saliva, pero es tolerable y los moldes se ajustan bien a los dientes por lo que no hay que estar pendiente de que se suelten mientras están colocados. Para comprobar si había algún cambio, hice unas fotografías a mis dientes antes de aplicar este primer kit y después de la primera vez de uso no noté absolutamente nada. Lo probé durante dos semanas más: si se hace de forma estricta durante al menos una o dos veces por semana, sí se nota un ligero tono más blanco en dientes que no están muy amarillentos.

Sus puntos débiles: viene solo con diez moldes de un solo uso por lo que si se utiliza mucho, la reposición debe ser continua y el precio resulta un poco elevado.

Con tecnología LED: Mysmile

Para quién es: para los que buscan un blanqueamiento un poco más profesional.

Por qué lo recomendamos: este kit es algo diferente al primero de los analizados ya que cuenta con un dispositivo con luz LED para aplicar a los dientes, una férula dental de silicona, seis jeringuillas con los productos blanqueadores que hay que aplicar en la férula antes de colocarla y una tabla de graduación del tono para ir comprobando poco a poco el cambio en los dientes. También incluye un manual de instrucciones. A priori es un poco más engorroso de utilizar que el primero pero una vez que se conoce el procedimiento es fácil de seguir. El dispositivo funciona con una pila de botón (CR2032) que viene incluida. Para comenzar a usarlo hay que colocar la férula sobre el dispositivo: hay que apretarla bien para que no se mueva. Esta férula tiene forma de U por lo que se coloca en los dientes fácilmente. Después, hay que coger una de las jeringas y con un aplicador ir esparciendo el producto blanqueador (compuesto por PAP, nitrato de potasio, hidroxiapatita y glicerina) por la parte superior e inferior de la férula. Con un cuarto de producto de la jeringuilla es más que suficiente para un solo uso. Después se coloca en la boca, de forma suave y sin apretar demasiado, y se pone en marcha la luz LED, que funciona como acelerador de los productos blanqueadores. En este caso, basta con diez minutos de uso. Después, hay que enjuagarse muy bien la boca y limpiar la férula con un poco de papel y agua.

Después del primer uso, tampoco noté ningún cambio significativo, sin embargo, con el uso continuado durante las siguientes semanas y fijándome en la guía de tonos sí es cierto que tenía los dientes un poquito más blancos. Imagino que con un uso prolongado de meses, el efecto se nota mucho más. El sabor a menta es agradable y aunque hay que sujetar bien la férula, el dispositivo no pesa nada y no es nada molesto.

Sus puntos débiles: hay que dedicar un poco más de tiempo para ponerlo en marcha.

Con dos geles: Lacer Blanc

Para quién es: para los que buscan un kit sencillo.

Por qué lo recomendamos: está compuesto por una férula fotoluminiscente: debe ponerse bajo la luz natural o artificial durante cinco minutos para que pueda emitir la luz azul que acelera el proceso de blanqueamiento posterior. También incluye dos geles: uno preparador y otro blanqueador. El preparador se extiende primero sobre la parte de los dientes a blanquear mientras que el segundo se aplica en la propia férula. Después, se coloca en los dientes superiores o inferiores (se queda muy ajustada) y se deja actuar durante 15 minutos. A continuación, hay que repetir el mismo proceso con el otro grupo de dientes. Al finalizar, es importante enjuagarse la boca con agua y limpiar bien la férula.

El fabricante indica que los resultados son más visibles tras una semana de uso durante una vez al día. Es cierto que pasado ese tiempo, se nota un cambio (mínimo) en el tono de los dientes, pero sí se nota algo de diferencia con respecto a los primeros días. Los geles tienen una consistencia y sabor similar a los de una crema de dientes normal y aunque tienen que estar en el interior de la boca durante media hora no resulta muy molesto. Cada kit ofrece un total de diez usos.

Sus puntos débiles: el kit es para diez usos por lo que se puede quedar un poco corto teniendo en cuenta que los resultados son visibles a largo plazo.

Con batería: OnlySmile

Para quién es: para los que tienen mucha paciencia.

Por qué lo recomendamos: también dispone de un dispositivo con tecnología LED (con 25 luces) y una férula ya incorporada. El dispositivo se carga a través de USB (con cargador incluido), viene con manual de instrucciones en varios idiomas y un bote de gel blanqueador de 40 mililitros que puede servir hasta para diez tratamientos. El producto viene bien presentado en una caja con una parte transparente para poder verlo desde fuera. A diferencia del resto de kits, una vez colocado en la boca y tras haber aplicado una pequeña cantidad de gel en la férula, hay que dejarlo actuar durante 45 minutos. Eso sí, no hay que estar pendiente del tiempo porque cuenta con un temporizador que suena cuando se ha cumplido el tiempo.

Es uno de los que considero más incómodos en el momento de colocarlo en la boca: aunque la férula se adapta bien a los dientes, dispone de otra parte de silicona que cubre parte de la zona que se encuentra alrededor de la boca y es bastante molesta, sobre todo los primeros minutos. Al tenerlo durante más tiempo, la producción de saliva es mayor y al final estás deseando que llegue el final del tratamiento. El dispositivo pesa más que el resto y se hace un poco pesado también. El gel, que contiene menos de un 0,1% de peróxido de hidrógeno, no produce sensibilidad ni tampoco tiene mal sabor y durante las pruebas puedo decir que no noté grandes cambios en el tono de los dientes aun usándolo dos veces por semana. El fabricante recomienda que tras el tratamiento solo se beba agua y no se fume durante las dos horas siguientes.

Sus puntos débiles: el precio es algo elevado y no se notan grandes cambios en el tono de los dientes.

Otros kits de blanqueamiento dental interesantes

• Si estás buscando uno con mucha cantidad de gel blanqueador: Celakeety. Dispone de doce geles blanqueadores para usar en la férula incorporada en el dispositivo.

• Si estás buscando un lápiz blanqueador: Phomanttonary. Con forma de lápiz se aplica directamente sobre los dientes.

Cómo hemos elegido y probado los productos

Aunque nunca he fumado ni tampoco bebo mucho café, es inevitable tener los dientes un poco amarillentos. En general, los tratamientos que se realizan en las clínicas dentales son bastante costosos por lo que me animé a probar estos kits de blanqueamiento dental en casa para comprobar si funcionaban. Igualmente, para elegirlos he tenido en cuenta la lista de ingredientes, totalmente seguros para uso dental y el cuidado del esmalte. Después de probarlos durante unas semanas puedo afirmar que no he conseguido unos dientes blanquísimos pero, con el paso del tiempo, sí que han adquirido un tono más blanco y bonito. Eso sí, hay que ser muy constantes y comprobar que no afectan al esmalte ni a la sensibilidad de la boca. Para utilizarlos por primera vez, tendría en cuenta las siguientes características:

● Materiales y medidas: lo mejor es que las férulas sean de silicona médica, para evitar que aparezcan bacterias y también se adapten mejor a la boca.

● Componentes: es recomendable que los productos blanqueadores no contengan peróxido de hidrógeno, que puede afectar a la sensibilidad y al esmalte de los dientes.

● Dispositivos: me resultaron más cómodos los dispositivos de tecnología LED que los moldes sueltos aunque estos últimos son más fáciles de utilizar.

● Experiencia de uso: antes de utilizarlos, hay que leer bien las instrucciones y tener en cuenta que hay que usarlos al menos una vez al día y varias veces durante la semana para notar cambios en los dientes de forma más inmediata.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 21 de abril de 2024.

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