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El pasado 7 de junio se celebró en Madrid una nueva edición de Los Imperdibles, una serie de festivales que tienen el objetivo común de abrir la innovación a los ciudadanos, y que cada año cambian de sede, de temática y protagonistas. Este año, #Imperdible_04 Planeta se ha centrado en los aportes de la innovación para el logro de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados por Naciones Unidas a través de la Agenda 2030.

Este festival, organizado por la Fundación Cotec, en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid, ha reunido más de 20 experiencias que buscan visibilizar como la innovación puede ayudar a conseguir los ODS. La inauguración contó con la presencia del Rey Don Felipe VI y la participación de escolares procedentes de 11 centros educativos de la Comunidad de Madrid, en su mayoría pertenecientes a la Red de Escuelas Unesco. Por la tarde, las puertas de La Nave, en el distrito madrileño de Villaverde, se abrieron al público. Con actuaciones musicales y una variada oferta de propuestas de participación gratuita.

Entre otras, los asistentes pudieron pilotar los drones que Unicef utiliza para hacer llegar paquetes de vacunación a zonas remotas; conocer los sistemas alternativos de cultivo mediante acuaponia y que no precisan suelo de Tilamur; acercarse al proyecto empodera.org por los ODS de la asociación de Ciber voluntarios; o participar en un Escape Room para “salvar al planeta en 20 minutos”. Estaban presentes grandes empresas como la Fundación Telefónica que, junto a LUCA, la Unidad de Datos de la operadora, explicó cómo el big data y la inteligencia artificial pueden ayudar a visibilizar diferentes dimensiones de la pobreza. Iberdrola, principal financiador del evento, dio a conocer, a través de una simulación de realidad virtual, el nuevo parque eólico en medio del mar Báltico, y Xtrematic, una plataforma vibratoria que proporciona experiencias como estar en un parque de atracciones, en parapente o en un circuito de motos. SEAT ofreció una actividad de educación vial para patinetes eléctricos. Y HP y el Museo Thyssen, mediante la realidad virtual, permitieron pasear por los prados franceses que pintó Van Gogh o desplazarse dentro de un bodegón holandés de hace cuatro siglos.

El objetivo 11 de los ODS, lograr ciudades sostenibles, estuvo presente de la mano de Vía Célere y su juego Célere Cities, con preguntas interactivas y maquetas de los edificios más emblemáticos de Madrid. El objetivo del taller: la toma de conciencia de cómo podemos actuar desde nuestros hogares para mejorar las condiciones medioambientales de las ciudades. Y es que, efectivamente, más de la mitad de la población mundial vive hoy en zonas urbanas. Y en 2050, esa cifra habrá aumentado a 6.500 millones de personas, dos tercios de la humanidad. Aunque las ciudades ocupan solo el 3% de la tierra, representan del 60% al 80% del consumo de energía y al menos el 70% de las emisiones de carbono. Por eso, “no será posible lograr un desarrollo sostenible sin transformar radicalmente la forma en que construimos y administramos los espacios urbanos”, afirma Naciones Unidas.

Priorizar la consecución de los ODS es, sin duda, una necesidad planetaria y una tarea pendiente. Ya han pasado cuatro años desde la aprobación de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, que señala claramente los retos medioambientales, sociales y tecnológicos fundamentales a los que el planeta se enfrenta, desde la transición ecológica a la reducción de inequidades y el logro de derechos sociales básicos. Resta poner en marcha transformaciones reales. Por eso, también en la ciudad de Madrid, recientemente se celebraba la conferencia Acelera 2030, de la que surgió la Declaración de Madrid, en la que se urge a “una estrategia que tendrá que ser en ocasiones disruptiva y arriesgada. Pero es ingenuo pensar que no existe un riesgo masivo en el status quo: no hay vuelta atrás del lugar al que nos estamos dirigiendo a zancadas”. En esto parece haber consenso: priorizar el logro de los ODS es un asunto imperdible.