Abierta la convocatoria del I premio de Periodismo Saliou Traoré
La agencia Efe y Casa África crean un galardón para homenajear al redactor senegalés y valorar la información de África sin estereotipos
Para comprender y escribir sobre África Occidental como el periodista senegalés Saliou Traoré lo hizo durante 37 años para la Agencia Efe hay que ser Saliou Traoré. Hay que tener su valentía para reivindicar en Gambia el libre ejercicio del periodismo, amordazado durante 23 años por la dictadura de Yahya Jammeh. Autocrítica para cuestionarse si es la lucha anticorrupción del gobierno senegalés de Macky Sall justicia o una caza de brujas. Honestidad para hablar abiertamente sobre el problema de la mendicidad infantil impuesta por algunas escuelas coránicas. Y ser feminista para recomendarle a una amiga, tras una relación sentimental fallida, que “el primer marido de una mujer es su trabajo” y defender la libertad de las mujeres para decidir si se resignan o no a la poligamia.
En definitiva, es preciso ser buena persona, como defendía Ryszard Kapuscinski, y tal y como Traoré, fallecido el pasado año tras una dura enfermedad, era y sigue siendo recordado por quienes compartieron con él en el salón de su casa de Dakar un thieboudienne con zumo de bissap. Así es también como probablemente a él mismo le gustaría ser rememorado. Como un periodista honesto e insobornable, que, aun siendo consciente de que un cáncer de páncreas podría acabar con su vida, mantuvo la esperanza de volver a teclear teletipos. Y se aferró hasta el último momento a las enormes ganas de vivir que contagió a todo en el que se cruzó con él, en Dakar o Segovia, dos de sus ciudades predilectas, la primera porque en ella creció como periodista y la segunda por el cordero segoviano que Traoré, confeso admirador de la gastronomía española, maridaba con agua y no con vino, puesto que su fe en el islam no le permitía beber alcohol.
Para poner en valor las buenas cualidades que destacan de él muchos de los reporteros con interés en África que le tienen como amigo y referente, la Agencia Efe y Casa África han creado el I Premio de Periodismo en español Saliou Traoré. El galardón con su nombre, que será entregado el próximo 14 de octubre, un día después del primer aniversario de su fallecimiento, en la sede de Casa África en Las Palmas de Gran Canaria, es una apuesta por una información del continente sin estereotipos y un homenaje póstumo al veterano corresponsal. Al premio, dotado con 5.000 euros, podrán concurrir periodistas que hayan publicado trabajos sobre el continente africano o de temática africana en idioma español, según estipulan las bases.
El galardón, con su nombre, será entregado el próximo 14 de octubre, un día después del primer aniversario de su fallecimiento, en la sede de Casa África en Las Palmas de Gran Canaria
En la primera edición se convoca una única categoría para el ámbito escrito, abierta a todo tipo de formatos: opinión, información, crónica, investigación, reportaje, serie de reportajes, dossier especial y publicados en medios impresos o en digitales. Además, todos los trabajos que se presenten al premio tendrán que haber sido difundidos entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2018. De esta manera, los impulsores del I Premio de Periodismo en español Saliou Traoré reconocen la trayectoria del periodista senegalés, su carácter pionero y el impulso a la diversidad que supuso su incorporación a la Agencia Efe en 1981 para reportar con rigor y desde África Occidental con base en Senegal. La creación del premio pretende honrar al corresponsal, quien, tras una estancia de dos años en Madrid para aprender español, lengua que hablaba de forma pausada -todo lo contrario que cuando empleaba su lengua materna, el wolof, que pronunciaba en un tono más alto y enérgico-, regresó a su país.
Desde su casa en el barrio Hlm Grand Yoff de Dakar, donde al fondo del patio se ubicaba la sede de la Agencia Efe, Traoré dio lecciones de periodismo y de vida sin pretenderlo. Fue el altavoz de algunos colectivos que en su país no tienen voz, como los homosexuales, las activistas contra el matrimonio infantil o contra la mutilación genital femenina. No se olvidó de contar historias de África en positivo, como la del fotógrafo Mamadou Gomis, quien después de haber pasado una temporada en Alemania estudiando decidió volver a Senegal donde tiene la certeza que está su futuro. Ni en negativo, como la lucha de los pequeños agricultores senegaleses para proteger sus tierras frente a las grandes compañías extranjeras. Ni tampoco de dar consejos: “utilicemos las adversidades para ser mejores personas”, le dijo a uno de sus amigos más cercanos poco antes de fallecer.
Belén Rodríguez es periodista.
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