La Amazonia de Brasil, asediada por las minas ilegales
La proliferación de minas ilegales se ha convertido en una epidemia para la selva brasileña. El Instituto Brasileño para el Medio Ambiente (IBAMA) ha iniciado una campaña para reprimir tales actividades en todas las minas ilegales de la selva amazónica
El proyecto del IBAMA rastrea todas las minas ilegales de la selva amazónica, que se extiende por Brasil, Venezuela, Colombia, Perú, Ecuador y Bolivia. En la foto, una vista aérea de una mina de casiterita ilegal en parques nacionales de Novo Progresso, en el Estado de Para, el 4 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)Está información se recaba a través de operaciones de mapeo, como parte del protecto llevado a cabo por el IBAMA conjuntamente con otras asociaciones ambientales. En la foto, un helicoptero del IBAMA sobrevuela una mina ilegal de oro durante una operación en las proximidades del municipio brasileño Novo Progresso, en el Estado de Para, el 5 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)Solo en la Amazonia Brasileña se han tipificado 453 minas ilegales, según los datos publicados por el IBAMA. En la imagen, una vista aérea de una de las minas de oro ilegales de la selva amazónica brasileña, en los parques nacionales de Novo Progresso, el 5 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)En noviembre, se llevaron acabo operaciones en varias minas ilegales de dos parques nacionales de la Amazonia Brasileña. Cuando los helicopteros del IBAMA descendieron para llevar a cabo la redada, algunos de los mineros huyeron hacia las profundidades de la selva. En la imagen, se ve como los mineros salen corriendo de una mina de casiterita ilegal tras apercibir la llegada de agentes durante una operación del IBAMA, en Novo Progresso, el 4 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)Un agente del IBAMA inspecciona una mina de oro ilegal en la Amazonia de Novo Progresso, el 5 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)Poco despues, unas 6 personas fueron detenidas. El objetivo real de las redades no son los mineros, que en muchos casos trabajan en condiciones de esclavitud, sino los propietarios de las minas ilegales, cuya identidad se desconoce. RICARDO MORAES (REUTERS)Un campamento de mineros en una mina de oro ilegal en Novo Progresso, el 5 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)En estas operaciones, los agentes destruyen la maquinaria de las minas, principalmente excavadoras y otra maquinaria pesada, generalmente costosa y dificil de reemplazar, a fin de cesar la actividades en estas minas ilegales. En la foto se puede observar una excavadora en llamas en una mina ilegal de casiterita, durante una operación del IBAMA en el municipio de Novo Progresso (Estado de Para), el 4 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)Una cocina improvisada en un campamento de mineros ilegal, en el municipio de Novo Progresso, el 5 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)Fuego controlado en una mina de oro ilegal en los parques nacionales de Novo Progresso, durante una operación llevada a cabo por el Instituto Brasileño para el Medio Ambiente (IBAMA), en la que se han destruido maquinaria y varios campamentos en una mina de oro ilegal.RICARDO MORAES (REUTERS)La minería ilegal contamina el agua de las comunidades locales por el mercurio, y contribuye a la deforestación. En la imagen, una mina de casiterita ilegal en parques nacionales de Novo Progresso, tomada durante una operación del IBAMA el 4 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)Un agente del IBAMA patrulla en una mina de casiterita ilegal, durante una operación en parques nacionales de las proximidades del municipio de Novo Progresso, en el Estado de Para, el 4 de noviembre de 2018.RICARDO MORAES (REUTERS)
