Stephen Fry suspende su luna de miel por ataques homófobos

Ser gay sigue despertando la homofobia en gran parte del planeta. Y ni siquiera las celebridades se salvan de ser atacados por su inclinación sexual. La última víctima ha sido Stephen Fry, quien la semana pasada había escogido Honduras para comenzar su luna de miel con su marido Elliott Spencer y de donde ambos han decidido irse tras ser objeto de ataques homófobos cuyos detalles no han trascendido.

Fry y Spencer se casaron el pasado enero en Norfolk pero decidieron retrasar su luna de miel unos meses para poder descansar durante una temporada más larga y dijeron que cuando la comenzaran se lanzarían a “una gran aventura” que les llevaría de viaje por medio mundo. Honduras era la primera parada en ese periplo pero según explicó Spencer en el tabloide Daily Mail “tuvimos problemas mientras estábamos allí de vacaciones. Fue homofobia. No quiero dar detalles pero decidimos marcharnos”. Antes de partir Fry colgó una foto en Instagram en la que se le veía con un montón de plátanos en la cabeza. Horas después anunciaba que cerraba su cuenta y se iban de Honduras.

Fry tiene 57 años y Spencer tiene 30 años menos. Llevan juntos varios años en los que han viajado a menudo a diferentes lugares del planeta. “Stephen me lleva a muchos de sus viajes y me educa” ha explicado en el diario británico. “Muchos de los países a los que hemos ido juntos no eran nuevos para él pero le gusta ir conmigo porque así los ve con ojos diferentes. Son experiencias que nos unen mucho”.

El año pasado estuvieron viajando durante meses por Europa y por Estados Unidos. “Estuvimos fuera mucho tiempo y la verdad es que eché de menos a mis padres pero cuando llegamos a Austria Stephen les invitó a volar hasta allí y fue muy divertido”.

Recientemente Fry, conocido por su activismo a favor de los derechos de los homosexuales, expresó su alegría tras el resultado del referéndum irlandés a favor del matrimonio gay durante el Hay Festival. “Me alegro mucho por los irlandeses porque han optado por respetar la santidad del matrimonio. No se trata de demostrar que somos muy progresistas sino de darle a todos los demás la posibilidad de serlo. A mi el matrimonio me ha sentado muy bien. Soy increíblemente feliz y creo que tengo muy buen aspecto precisamente por eso. Además, estoy tan bien alimentado como antes” bromeó.