Choque de civilizaciones
Los acontecimientos recientes desde el atentado al semanario humorístico Charlie Hedbo reabren el debate de la famosa teoría del choque de civilizaciones de Huntington. Pero más allá del supuesto antagonismo entre la cultura musulmana y la occidental, que se pretende fervientemente mostrar ante la opinión pública, son antiguos cleaveages, que resurgen de forma sutil, los que tenemos que enfrentar. Estas dificultades toman forma en discriminación social y económica, trascendiendo la cuestión religiosa y cultural en el trasfondo. Como joven musulmana y española que me siento, pertenezco a esa generación de españoles nacidos en España y de padres emigrados que nos preguntamos qué será de nuestro futuro en España. Preguntas como: ¿podré lograr un trabajo con el velo? ¿Tendré que revivir el pasado de mis padres y conformarme con trabajos no cualificados? ¿Puedo aspirar a algo más o siempre seremos extraños? son las que nos inquietan. Respetamos la democracia y las libertades origen de la esencia humana, pero lo que no entendemos es que hoy en día la identificación religiosa pueda estar reñida con sentirse parte de una nación. Y lo que es más importante, que los demás nos reconozcan parte de ella.— Fatima Ezzamouri El Arif.
