Los Mandela dan la bienvenida a la película sobre su patriarca

Johannesburgo se convirtió la tarde del domingo en alfombra roja para los protagonistas de El largo camino a la libertad, la película sobre la vida de Nelson Mandela, que se estrenará el 28 de noviembre en Sudáfrica y que el domingo celebró su preestreno. Idris Elba, el actor británico que encarna al expresidente sudafricano, finalmente pudo asistir, recuperado del ataque de asma que sufrió el viernes en el mismo avión que tenía que trasladarlo hasta la capital africana.

Con traje y corbata oscuros y una sonrisa permanente en su rostro, Idris fue la estrella indiscutible, adulado no solo por el grupo de fans que intentaba sacarle una foto sino por la misma exmujer de Mandela, Winnie, y su actual esposa, la mozambiqueña Graça Machel. El actor aseguró que viendo la estima que Madiba sigue levantando en Sudáfrica y en todo el mundo, encarnarlo supone una “gran responsabilidad”.

Elba y Winnie, vestida con un traje tradicional de la etnia xkosa, se saludaron con un gran abrazo y casi no se separaron en toda la velada. La carismática exesposa de Mandela se confesó “emocionada” por un estreno tan concurrido y aseguró “no tener palabras para narrar la traslación de tanto dolor en una película”. Para Winnie, la cinta tiene que servir para mantener vivo el recuerdo de los luchadores “no solo del camarada Madiba sino de todos los que perecieron en la guerra por la liberación”.

El sábado, el elenco de actores acudió a un encuentro con la prensa en la Fundación Nelson Mandela. Allí, la hija pequeña del exmandatario sudafricano, Zindzi, explicó por primera vez los “sentimientos encontrados” que le produjo ver la película, basada en las memorias del mismo título que el exlíder antiapartheid empezó a escribir a escondidas en la prisión. En cierta manera, la cinta cuenta parte de su vida y de su familia.

Zindi y su madre Winnie pidieron al productor poder visionar la película acabada “a solas” y ambas acabaron “conmovidas”, tanto por las caracterizaciones de los actores como por los episodios narrados. “Fue muy emocionante verla”, reconoció, aunque ver en la gran pantalla episodios de su padre preso o las penurias que tuvo que pasar de niña le hicieron “revivir emociones que había enterrado, emociones sobre la ausencia de mi padre, de mi madre, de crecer sin padres”, refiriéndose a los 17 meses que su madre estuvo también presa castigada por el régimen racista.

A pesar de ese dolor, la hija admitió que la película ha sido “terapéutica”, al mismo tiempo que se ha alegrado de ver que “el amor que mantuvo a la familia unida” durante los 27 años que Mandela estuvo preso, “aún continúa”. En aquella época, rememoró, había muchos momentos en que “no había esperanza de que nadie nos rescatara”.

Winnie y Mandela se separaron al poco tiempo de que el Premio Nobel de la Paz saliera de la cárcel pero, a pesar de sus diferencias, el expresidente siempre ha apoyada a su exmujer en sus problemas con la justicia. De hecho, Winnie ha sido una de las visitas habituales en los casi cinco meses que el exmandatario lleva ingresado.

En la presentación sudafricana de la cinta también estuvo presente Naomie Harris, la estadounidense que interpreta a Winnie. Tanto ella como su compañero Idris tuvieron que ensayar cada día el característico acento inglés de los sudafricanos, trabajo con el que se ha demostrado satisfecha y que ha contado con la aprobación de los actores locales. Según explicó el productor, incluso Winnie quedó maravillada de que la actriz parecía “una auténtica africana”.