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Intel diseñará microchips en Barcelona en un laboratorio financiado al 50% por el Gobierno

El laboratorio contará con una inversión de 400 millones y supondrá la contratación de 300 trabajadores

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reunido con el director ejecutivo de Intel Corporation, Pat Gelsinger en Davos,
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reunido con el director ejecutivo de Intel Corporation, Pat Gelsinger en Davos,Moncloa/Fernando Calvo (Moncloa/EFE)
Alfonso L. Congostrina

Barcelona albergará la sede de un laboratorio de diseño de microchips semiconductores de la multinacional Intel. La empresa estadounidense pretende ubicar una infraestructura dedicada a la investigación de semiconductores en España en plena crisis por la falta de estos componentes en Europa. Intel ha alcanzado un acuerdo con el Barcelona Supercomputing Center- Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS) para ubicar este centro en las instalaciones del Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) en la capital catalana y, según advierte BSC-CNS, se pondrá en marcha “lo antes posible”.

BSC-CNS es un consorcio público formado por el Ministerio de Ciencia e Innovación (60%), el departamento de Investigación y Universidades de la Generalitat (30%) y la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) (10%). El director del BSC, Mateo Valero, ha reconocido a Efe que llevan varios meses negociando con Intel para acoger un laboratorio que consideran estratégico. De hecho, el impulso final de la operación tuvo lugar el pasado martes en Davos (Suiza) cuando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el consejero delegado de Intel, Pat Gelsinger, hicieron pública la elección de Barcelona. “Emocionado de asociarnos con España para hacer avanzar la computación zettascale en Europa. Esta decisión se basa en los planes de Intel para crear un ecosistema robusto de innovación en la UE”, según tuiteó ayer Gelsinger.

El acuerdo económico al que se ha llegado para hacer realidad el laboratorio implica el desembolso de hasta 400 millones de euros en los próximos diez años. De esta inversión, Intel aportará 200 millones, mientras que el Gobierno se hará cargo de los 200 millones de euros restantes. El gobierno de Pedro Sánchez advertía el martes que el acuerdo con Intel es básico dentro de las políticas europeas que pretenden ubicar el 20% de la producción mundial de los semiconductores en Europa. El martes el Consejo de Ministros aprobó el Proyecto Extratégico (Perte) sobre semiconductores dotado con 12.000 millones de euros procedentes del Plan de Recuperación Next Generation EU con los que se sufragará la parte pública del laboratorio especializado en procesadores.

Según BSC-CNS está prevista la contratación de entre 250 y 300 trabajadores. Unos puestos de trabajo de alto nivel que desde la dirección se asegura que se irá ampliando. El director del centro de supercomputación espera que la contratación se efectúe “lo antes posible” para poner en marcha el laboratorio en los mínimos plazos posibles.

“Nos aliamos con la mejor empresa de diseño de chips del mundo para crear puestos de trabajo de alto nivel en España, que gastarán su dinero aquí y pagarán también aquí sus impuestos. Y todo en un tema pionero a nivel mundial. Es una aventura que vale la pena vivir”, ha apostillado Mateo Valero. El proyecto supone una apuesta por la computación a zetaescala, una tecnología mucho más potente que la actual, tras años de colaboración entre el centro de supercomputación catalán en la arquitectura a exaescala.

El laboratorio se ubicará en el edificio Nexus II del Capus Nord de la Universidad Politécnica de Cataluña. El espacio está vacío desde 2021 después de que BSC-CNS se trasladara a otras instalaciones. De esta forma, el centro de innovación podrá ubicarse allí sin necesidad de construir un nuevo edificio.

El director del BSC-CNS se mostró convencido de que la existencia de un laboratorio en Barcelona para diseñar estos microprocesadores ayudará a atraer inversión para “una o dos” fábricas de estos elementos gracias a “los contactos y las colaboraciones” que facilitará, según ha comentado el director.

Precisamente, la instalación en España de plantas de fabricación con capacidad tanto inferior como superior a los cinco nanómetros es uno de los principales objetivos del Perte que aprobó el martes el Consejo de Ministros.

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