El BBVA negocia el ERE por caída de beneficios y los sindicatos piden una bajada salarial de los directivos
La mesa de diálogo se constituye sin facilitar la cifra de afectados. La próxima reunión será la semana que viene
Tras más de cuatro horas de reunión, se ha dado el pistoletazo de salida a la negociación del ERE del BBVA que, según fuentes de los analistas, podría implicar hasta 3.000 personas. Sin embargo, el banco no ha facilitado ninguna pista sobre el alcance, más allá de que se circunscribe al negocio en España. Esto significa que la plantilla afectada serán unos 23.300 empleados, ya que ha dejado fuera a las sociedades del grupo. La siguiente reunión será a finales de la próxima semana y se prevé continuidad los martes y jueves
Según ha podido este diario de fuentes de la negociación, el despido colectivo se va a sustentar en “motivos económicos por disminución continuada de beneficios, y motivos productivos y de organización derivados de la transformación digital”.
No han aportado más datos en la reunión. Según Comisiones Obreras, el sindicato mayoritario en la entidad, el proceso tiene soporte legal, pero no están de acuerdo en las motivaciones y han mostrado su “total disconformidad con el mismo. Si las razones son económicas, esperamos que esto tenga también efecto en los sueldos del equipo directivo y sus variables”, han añadido. Los sindicatos consideran alta la cifra que se baraja y negociarán para que el impacto sea el menor posible.
La composición de la mesa, tanto para el periodo de consultas, como para el de negociación se ha constituido con 13 miembros: 5 de CC OO, 3 de la ACB (la Asociación de Cuadros de Banca), 2 de CGT, 2 de UGT y 1 de SEC, una federación sectorial del Sindicat D’Estalvi de Catalunya y el Sindicato de Empleados de Crédito. Los minoritarios van a poder asistir, sin voto y con una única portavocía.
El banco presidido por Carlos Torres entiende que para garantizar su competitividad y la sostenibilidad del empleo a futuro, resulta ”imprescindible” continuar trabajando de forma aún más decidida en reducir su estructura de costes. Para apoyar esta decisión, se justifica en el contexto de “profunda transformación” en el sector, marcada por una enorme presión competitiva, bajos tipos de interés, la adopción acelerada de los canales digitales por parte de los clientes y la entrada de nuevos y grandes actores tecnológicos.
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