La entrada de turistas hasta julio vuelve a los niveles previos a la crisis

El sector turístico español está esquivando en 2011 los embates de una crisis que no termina de dejarse atrás. La entrada de turistas extranjeros alcanzó entre enero y julio casi 32,3 millones, el 7,4% más que en el mismo periodo del año anterior, según los datos que publicó ayer el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. La cifra supone acercarse a los niveles previos a la última recesión y permite al sector anticipar que 2011 será el mejor año desde el estallido de la crisis. Si no hay catástrofes.

El batacazo del turismo en 2009 y 2010 provocó un descenso de cinco millones de visitantes internacionales, mientras que en toda la década anterior la afluencia no había hecho más que crecer. Pero los casi 7,5 millones de turistas extranjeros que llegaron a España en julio (el 7,2% más en tasa interanual) han servido para situar el dato acumulado de 2011 cerca del que se registraba en ese mismo mes en 2007, el mejor año de la historia del turismo español en cuanto a entrada de extranjeros. Una buena expectativa que se apoya, según numerosas voces del sector, en varios pilares pero sobre todo en uno: los conflictos y la inestabilidad en el norte de África, que están provocando el desvío de turistas hacia España.

España sigue beneficiándose de la inestabilidad en el norte de África

El año 2007 terminó con 58,6 millones de turistas, cifra que cayó a 57,2 millones en 2008 y a 52,1 millones en las dos temporadas siguientes. "Probablemente en 2011 no llegaremos a los niveles de 2007, pero estaremos cerca de los de 2008", augura el presidente de la patronal hotelera Cehat, Joan Molas.

La desaceleración económica de importantes países emisores de turistas a España constituye, no obstante, una amenaza y un problema que ya se ha notado en los datos de julio. El mercado francés -segundo emisor- retrocedió el 1,6%, mientras que el alemán -tercer mercado- solo mejoró el 0,4%. En cambio, los turistas británicos, que son los más numerosos, aumentaron el 7,3%.

Molas celebra que más allá de esos tres países, los mayores mercados para España, cada vez crecen más otros como el belga o el ruso, y considera que la tendencia es, en general, muy positiva. "Pero habrá que ver el gasto medio por cliente y los resultados de facturación", advierte.

Datos que también espera ver el vicepresidente de Exceltur, José Luis Zoreda, antes de proclamar que el sector deja atrás la crisis. Y no es su única preocupación: "Va a ser un verano con muy buena afluencia turística extranjera, pero la nacional, que representa casi el 50%, está más que contenida. Y aunque sube la demanda holandesa [la que más creció en julio, con un incremento del 32%] y la británica, un mercado fundamental para nosotros como es el alemán está estancado".

Sin dejar de valorar lo positivo del dato acumulado hasta julio, Zoreda aún lanza una advertencia más, ya que en su opinión "se están redireccionando flujos turísticos del norte de África que no se van a mantener eternamente".

Canarias es la comunidad autónoma que más se beneficia de la inestabilidad en el Magreb y la que más crece en términos interanuales, a pesar de que Cataluña y Baleares, por este orden, la superan en número de turistas en el acumulado del año. A continuación se sitúan Andalucía, la Comunidad Valenciana y Madrid.

"Importantes destinos mediterráneos como Túnez y Egipto siguen cerrados, y los problemas en Grecia también han favorecido los destinos españoles", afirma Rafael Gallego, presidente de la Federación Española de Agencias de Viajes (Feaav). "Ese es el motivo más importante para la mejora del sector en España", apunta Gallego, resaltando también otras causas como la recuperación de la economía mundial respecto a los dos años anteriores, o la "buena promoción" para abrir nuevos mercados, como el ruso. "Si no hay cenizas volcánicas ni huelgas, 2011 probablemente será uno de los tres mejores años de la década", concluye.