Los socialistas creen que Bildu puede abrir una brecha en el nacionalismo

La pretensión de unir fuerzas soberanistas choca con la incertidumbre que planea sobre el plan B de la ilegalizada Batasuna para estar en la cita electoral del 22-M. Los socialistas pusieron ayer en entredicho los réditos que el independentismo puede lograr de su alianza en las listas de Bildu. El aspirante del PSE a diputado general de Guipúzcoa, Miguel Buen, fue el más contundente al advertir de que "mucha gente de EA no va a votar a un candidato de la izquierda radical abertzale", en referencia a la posible inclusión de independientes de tal procedencia en la coalición planteada como alternativa a la ilegalización de Sortu.

Durante su intervención en el Fórum Europa-Tribuna Euskadi en Bilbao, Buen hizo hincapié en la distinta sensibilidad de los partidos que pretenden impulsar la unidad soberanista y aventuró que "algún lío van a tener" en la conformación de sus listas. No situó a los promotores de Bildu, sin embargo, como únicos perjudicados, sino que amplió el abanico al conjunto del nacionalismo. El candidato a diputado general recordó el complejo reparto de fuerzas de Guipúzcoa en las forales de 2007, cuando no pudo formar gobierno pese a ser la suya la lista más votada, para advertir al PNV de que el polo soberanista puede restarle presencia. "Si Sortu concurriera con sus propias siglas posiblemente se situaría por delante" en esa provincia, manifestó.

El PP insta a actuar "con todas las consecuencias" contra la coalición 'abertzale'

EA recalca que los candidatos deberán comprometerse con las vías democráticas

Pese a las continuas alusiones a la necesidad de "no hacerles gratis la campaña", lo cierto es que las referencias a la izquierda abertzale fueron de nuevo repetitivas ayer, y la posible repercusión de su presencia electoral en el mapa de las instituciones, una constante. El alcalde de Vitoria, el socialista Patxi Lazcoz, reconoció que observa atento las evoluciones de la antigua Batasuna. Apenas un puñado de votos puede decantar el Ayuntamiento de la capital alavesa en favor de PSE, PP o PNV, y la presencia de Bildu puede jugar en contra de los intereses nacionalistas en un escenario tan igualado. "¡Cómo no vas a tener interés en lo que ocurre con tus posibles y potenciales adversarios políticos!", argumentó Lazcoz en Radio Euskadi.

Sin hacer mención a cálculos electorales, su homólogo donostiarra, el también socialista Odón Elorza, se mostró favorable en una entrevista en Telecinco a que la antigua Batasuna pueda "jugar en la política desde la democracia". El peso de la izquierda radical abertzale es considerable en la capital donostiarra, donde la lista de ANV fue anulada hace cuatro años y el PSE gobierna con el apoyo de Alternatiba y Aralar. Esta última formación también podría verse perjudicada con la presencia de una coalición soberanista de la que no forma parte.

Quizá es en Vizcaya donde menos inquietud abre en el resto de formaciones la incertidumbre en torno a la izquierda abertzale. El candidato socialista a diputado general, José Antonio Pastor, aprovechó un acto en Basauri para dejar claro que "no es preocupación de los ciudadanos si Bildu se pone en marcha o no", o "si lo conforman tres partidos o cuatro". "Son problemas que tiene esa llamada izquierda abertzale, no los socialistas y creo que tampoco la sociedad vasca, así que son ellos quienes han de resolverlos", aseveró, antes de apuntar a la gestión como clave de los resultados el 22-M.

Los socialistas son tan conscientes como el PNV de su relevancia en Vizcaya. En una línea muy similar a Pastor, el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, reconoció que no tiene "ni idea" de quiénes van a ser los candidatos que pueda promover la antigua Batasuna en la capital. "Si no está Sortu, estará Bildu, porque puertas al campo no se le pueden poner, pero yo no entro en cálculos electorales", indicó.

Quien no habló de cálculos, pero sí de pactos, fue el presidente del PP en Euskadi, Antonio Basagoiti, quien admitió en Radio Popular que los momentos "de mayor tensión" del acuerdo de su formación con el PSE han sido en torno a "la decimotercera marca de Batasuna, porque no hay ninguna garantía de que no sean los de siempre". El líder de los populares vascos emplazó a actuar "con todas las consecuencias" contra Bildu, que a su juicio es la marca "buena de ETA", y apostó por impugnar las listas de la coalición y hacer "todo lo posible" para impedir que concurra a las elecciones.

El parlamentario de EA, Juanjo Agirrezabala, por su parte, insistió en ETB en que "el único plan" de Bildu consiste en aglutinar a las fuerzas soberanistas desde una perspectiva de izquierdas y afirmó que todos los integrantes de las listas tendrán que comprometerse, por escrito, con la apuesta por las vías políticas y democráticas.