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Cebek reclama una ley orgánica para "defender" el Concierto

El País

El futuro del Concierto Económico del País Vasco volvió ayer a cobrar carta de naturaleza días después de la polémica provocada por un cruce de opiniones contrapuestas entre el lehendakari Patxi López y el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao. El origen de la controversia surgió durante la asamblea de la Confederación Empresarial de Vizcaya (Cebek) y ayer el presidente de esta patronal, José María Vázquez Eguskiza, recuperó la idea de procurar la "defensa que no blindaje" del Concierto mediante una ley orgánica para hacer frente "a los merodeadores", a quienes localizó en "comunidades próximas, en alguna central sindical y en algún partido político".

Así lo puso de manifiesto en el desayuno informativo del Forum Euskadi, donde fue presentado por Mari Carmen Gallastegui, en presencia del propio Bilbao, del socialista José Antonio Pastor o el diputado nacionalista Josu Erkoreka, entre otros. Vázquez Eguskiza, sin embargo, transmitió la "colaboración" y la "lealtad" al nuevo Gobierno vasco y a su lehendakari en la etapa de cambio abierta y desvcló, además, que los tres diputados generales habían declarado hace unos días, en un encuentro privado con el Círculo de Empresarios, que "no harán oposición" al Ejecutivo socialista.

En su lectura de la situación económica, el presidente de Cebek constató el "final de un ciclo" y recorrió los aspectos "económicos y éticos" que deben acompañar el nuevo modelo. Para ello, pidió "medidas de consenso" para hacer frente a la crisis y opinó que las instituciones deben practicar "políticas de activación contra los presupuestos públicos, en la medida que cada uno pueda". En esta línea, reclamó que se revise "todo el esquema" en el que se enmarca el diálogo social para empezar sobre "una hoja en blanco" y evitar con ello que la negociación colectiva parta de premisas inamovibles. Según dijo, "las apreturas que ahora tenemos los empresarios necesitan también un tipo de colaboración distinta".

Garoña y cajas

En su intervención, se mostró en contra del cierre de la central nuclear de Garoña al señalar que, "si el Consejo de Seguridad dice que eso está bien, creo que sería una pérdida económica lamentable y una pérdida de posición industrial muy importante". Y en relación con la fusión de las cajas vascas, en el día que se supo la expansión de BBK por Guipúzcoa, admitió que "las cosas vendrán". "Pero no pongamos conflictos donde nos los hay", agregó.

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