Quílez reúne en 'Mala vida' siete historias de delincuentes
Mala vida. Historias de atracadores y asesinos (Aguilar): éste es el sugestivo título de la última obra narrativa de no ficción de Carles Quílez, periodista de sucesos y tribunales de la cadena SER, que fue presentada ayer en la librería Laie. Son siete capítulos que recrean a una raza de delincuentes en peligro de extinción, gentes de otra época con un futuro muy dispar; por ejemplo, el protagonista de Manolo, el del aceite, que nunca fue detenido y ahora regenta varias empresas. Son personajes a los que el autor trató como periodista y que le permiten reivindicar la novela de no ficción como un género más.
José María Mena, ex fiscal jefe de Cataluña, y autor del prólogo, dice de la obra: "Nos transporta a ciertos niveles de nostalgia porque nuestros delincuentes, los de siempre, eran artesanos de la criminalidad y parecen más reinsertables". "Está escrita desde la pasión por los personajes", explicó el consejero de Interior, Joan Saura, que dio muestras de haberla leído.