Greta Garbo
Bajo la primavera de un sombrero francés, la felicidad parece un horizonte posible,
si no fuera por ese perfil tan delicado,
como recién grabado en la aleación de una moneda.
No se puede tener ese perfil y ser feliz,igual que no se puede ser joven y ser sabio.
ser un halcón con levedad de alondra.
No se puede mirar con esos ojos
en cuya luz serena se anticipa
toda la dimensión de su leyenda
como una
tragedia necesaria,
y ser, y seguir siendo
feliz.
No se puede ser sólo una mujer
con la voz y el perfil de Greta Garbo
cuando se ha sido ya Ninotchka,
Margarita Gautier
o Cristina de Suecia.
Ana Isabel Conejo (Terrassa, Barcelona, 1970), escritora, traductora y bióloga, ganó con Atlas el Premio Hiperión en 2005 y el Ojo Crítico en 2006. Es autora, entre otros libros, de los poemarios Umbral, Prisión o llama, Ciclos, Grises y Vidrios, vasos, luz, tardes (accésit del Premio Adonais 2003), y de la novela Los cabellos de Santa Cristina. El poema 'Greta Garbo' forma parte del libro Rostros, ganador del XI Premio Internacional Antonio Machado en Baeza, que próximamente publicará Hiperión.