_
_
_
_
_

Xàbia concede la contrata de basura a una empresa denunciada por soborno

El PP y Nueva Jávea votan en contra de la adjudicación porque el contrato "huele"

La empresa Cespa, una de las dos implicadas en la denuncia por un presunto intento de soborno a concejales del PSPV, se alzó ayer con la contrata del servicio de basura en Xàbia, por valor de 40 millones para los próximos diez años. Los socialistas se olvidaron de las denuncias que destaparon el año pasado y fruto del pacto con el alcalde centrista, Eduardo Monfort, apoyaron esta propuesta. Su voto causó malestar en parte de la militancia socialista y en la oposición, en especial el PP, que exigió conocer los motivos reales por los que el PSPV cambia de criterio.

El PP se pregunta por "el peaje político" y los "beneficios" que ha obtenido el PSPV

Doce votos a favor y ocho en contra. El PSPV de Xàbia se unió ayer a sus socios de gobierno del Bloc-Centristes y, junto con el único concejal del grupo Ciudadanos por Jávea (CpJ), antiguo socio de gobierno del PP, votaron a mano alzada a favor de adjudicar el servicio de recogida de basura a Cespa, la empresa favorita del alcalde Eduardo Monfort. Cespa, del grupo Ferrovial, está involucrada, junto con la otra aspirante FCC, en presuntos sobornos que denunció un concejal socialista ante la Guardia Civil. Las cintas de la conversación del supuesto soborno de directivos de Cespa, en la que brindaban su apoyo para financiar la campaña electoral, están en manos de la Guardia Civil, mientras el juzgado número 4 de Dénia mantiene abiertas diligencias por el contenido de la reunión de directivos de FCC con concejales del PSPV en la que presuntamente éstos ofrecieron hasta 300.000 euros si los socialistas les apoyaban.

El PSPV destapó el escándalo del soborno el año pasado y aseguró durante toda la campaña electoral que no apoyaría a ninguna de las dos empresas salpicadas en este caso. También defendió que lo mejor sería municipalizar el servicio de recogida de basuras en el centro y en la playa. Pero ayer votaron a favor. "El PSPV nunca ha cambiado de opinión, al pactar hemos cedido en algunos aspectos al igual que el Bloc en otros", justificó durante el pleno Rafael Bas, ex portavoz socialista. Una decisión que ha provocado una fractura en la agrupación local del PSPV de Xàbia donde los militantes están recogiendo firmas de apoyo a una carta que remitirán a la dirección en Valencia manifestando su malestar e indignación por este cambio de postura. "Seguimos pensando que la municipalización del servicio es lo mejor -agregó Bas- pero creemos en la palabra del alcalde y de su grupo de sentar durante esta legislatura las bases para poder crear una empresa municipal de servicios", dijo el edil socialista.

Los argumentos con los que el PSPV rechazó la posibilidad de municipalizar el servicio, como defendía en su programa electoral, no convencieron a la oposición, PP y Nueva Jávea, que suman nueve concejales. El portavoz del grupo popular, Juan Carlos Generoso, habló de "incertidumbre y confusión" y acusó al partido socialista de "haber creado un clima de intrigas, sospechas y denuncias" para después votar a una de las empresas que ellos habían denunciado. Y propuso declarar desierto el concurso y sentar unas nuevas bases que se ajustaran a la realidad. El portavoz de Nueva Jávea, Francisco Catalá, se unió a este argumento al cuestionar las irregularidades del pliego del contrato, ya que las condiciones que se recogen fueron redactadas hace tres años y no contemplan aspectos actuales como el incremento del IPC, las nuevas necesidades del municipio o el aumento salarial de los trabajadores. Observaciones que el alcalde, Eduardo Monfort, del Bloc-Centristes, tachó de improcedentes.

El PP votó en contra de la adjudicación con mascarillas en la cara para denunciar "que en Xàbia huele el contrato de la basura" -una frase que ya en enero pronunció el propio Monfort- y reclamó al PSPV y al Bloc transparencia y rigor. El portavoz del PSPV, José Chulvi, argumentó que en el municipio existe una "necesidad urgente de tener una buena empresa que se haga cargo de la recogida" y acusó a la oposición de intentar crear una crisis en el gobierno al ofrecer su apoyo a los socialistas para municipalizar el servicio. Estas manifestaciones tuvieron su respuesta entre los populares ya que su portavoz, irónicamente, comentó que esperaba que "el peaje político", que había supuesto el cambio de opinión les hubiera proporcionado "buenos beneficios y enriquecimiento, políticamente hablando". Las risas en el salón de plenos no se hicieron esperar.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Ante el silencio de los socialistas, la defensa la realizó el alcalde, quien dejó caer una pregunta en la sala: "¿Qué grupo no votaría hoy a favor de la contrata si hubiera podido pactar gobierno con el Bloc?". La respuesta vino del único edil de Ciudadanos por Jávea, Juan Ortolá, ahora en gobierno y quien hasta hace tres meses formaba parte de la oposición y había sido antiguo socio del PP, al manifestar que él encontraba la adjudicación correcta y pensaba dar su respaldo.

El PP volvió a criticar al PSPV al acusarlo de haber denunciado un "falso escándalo" y haber engañado con ello a los medios de comunicación y a los ciudadanos de Xàbia con el único objetivo de hacer daño a personas y a partidos políticos. "Hoy tenemos la prueba de aquellas acusaciones de corrupción que vertisteis eran falsas y que la salida más digna, para vosotros no es la municipalización", dijo Moragues.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_