Navarra, el precio de la traición
La ironía no queda bien cuando se traslada a la letra impresa. Y eso es lo que ha ocurrido con un comentario que hice hace varias semanas cuando conocimos la decisión del partido socialista de negociar con Nabai para configurar un Gobierno de coalición. Dije entonces que con tal de que no cometieran semejante fechoría, estaba dispuesto a retirar mi libro Navarra, el precio de la traición, pero añadiendo que si al final pactaban la entrega del Gobierno Foral a los nacionalistas, en tal caso mi libro sería premio Nobel de literatura.
El editorial de EL PAÍS (2 de julio de 2007) no refleja ni la ironía de mis palabras ni su contenido exacto. Me atribuye una voluntad de pacto con los socialistas navarros después de haberlos tachado de "traidores" a la Comunidad Foral. Pues bien, nunca he acusado a los socialistas de traición. Sí he apelado a sus convicciones constitucionalistas y fueristas para denunciar un pacto contra natura con quienes pretenden la integración de Navarra y la independencia de Euskal Herria. Los socialistas otorgarían a los nacionalistas un extraordinario instrumento para la difusión de sus postulados políticos que hoy por hoy son claramente minoritarios en la sociedad navarra. Cito tan sólo un párrafo de mi libro: "Si los socialistas navarros fueran consecuentes con lo que muchos dicen en privado, la solución vendría del entendimiento con UPN y el CDN. Estoy absolutamente convencido de que el partido fuerista estará dispuesto a compartir el Gobierno o a llegar a pactos parlamentarios y presupuestarios. Así se hizo en otras épocas y el resultado fue excelente para Navarra" (página 334).
Por último, aclaro que mi libro -calificado como una burda patraña por el candidato Puras- es un ensayo sobre el proceso abierto por el presidente Zapatero, basado en hechos que han quedado irrefutablemente confirmados por las recientes revelaciones sobre las conversaciones con ETA y Batasuna publicadas primero por EL PAÍS y en buena parte ratificadas por Gara. Los dos últimos capítulos se refieren a la cuestión navarra. En ellos se alerta a los navarros de que Navarra es la clave del proceso y que la formación de un Gobierno de coalición con Nabai podía ser la primera parte del precio a pagar para la resolución del conflicto. De ahí mis llamadas a la responsabilidad de los socialistas navarros. Si después de la ruptura de la tregua los nacionalistas consiguen gobernar Navarra, volverá a levantarse la sospecha fundada de que el proceso continúa.
