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María Teresa Sáez Ponte, directora genearl del BEF

En el banco de las cajas

Dicen de María Teresa Sáez que es una mujer "optimista y positiva", y que como profesional es "infatigable, rigurosa, autoexigente y tenaz, muy tenaz". Son, sin duda, esos calificativos los que le han servido para llegar a un lugar de privilegio dentro de un mundo, el financiero, especialmente masculino, hasta alcanzar la dirección general del Banco Europeo de Finanzas (BEF), una entidad que se ha convertido desde el pasado mes de abril en el banco de las cajas andaluzas. Una mujer, la segunda en Andalucía, que logra ocupar un puesto de dirección al máximo nivel de una entidad financiera.

Profesionalmente, de María Teresa Sáez destaca su perfil de carácter financiero, especialmente en inversiones y mercados. Licenciada en Ciencias Económicas por la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Santiago, ha adquirido una gran experiencia a lo largo de una dilatada carrera profesional, con especial atención en su paso por el Instituto de Crédito Oficial y Caja España, entidades en las que ostentó cargos de relevancia.

Es precisamente ese perfil el que se buscaba para dirigir el BEF, un banco que nace con la intención de servir de instrumento financiero para el desarrollo de proyectos colectivos. Un banco que servirá a Andalucía como banca institucional y que permitirá ordenar, coordinar y rentabilizar la amplia cartera empresarial de sus cinco dueños: Unicaja (33%), Cajasol (33%), Cajasur (16,5%), Caja Granada (16,5%) y Caja Jaén (1%).

Nacida en A Coruña en 1951, María Teresa asegura que ha logrado siempre compaginar su vida familiar con el trabajo. Eso sí, recuerda "alguna tarde en el parque en Madrid" a finales de los ochenta, cuando sus dos hijos eran pequeños, vigilándolos mientras jugaban y con un libro de opciones sobre tipos de interés en las manos. Además, considera clave para este logro el apoyo de su marido.

Aficionada al cine, la lectura, la cocina y a dar largos paseos, en verano en las playas de A Coruña o en la sierra de Cameros, la nueva directoral general del BEF posee en su currículo otra experiencia adquirida en el ICO que le servirá para su nueva tarea: ha sido responsable de los vínculos con los diferentes organismos que tutelan y administran los mercados financieros, tales como la CNMV, la Central de Anotaciones, agencias de calificación y con la prensa financiera internacional en todo lo relacionado con la captación de pasivo y la posición del ICO en los mercados de capitales. Los que han trabajado con ella destacan, además, su gran empuje ante los nuevos retos, y la capacidad de ser asequible y cercana a las personas que le rodean.

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