Miles de personas se manifiestan en Guayaquil a favor y en contra de Correa
El Gobierno ecuatoriano del presidente Rafael Correa y la oposición midieron ayer sus fuerzas por primera vez en dos multitudinarias manifestaciones en Guayaquil, la segunda ciudad en importancia del país. Unos salieron a la calle para respaldar el proyecto de reforma constitucional del presidente, y los otros para intentar ponerle freno. El plan de Correa, que se plasmará en la consulta popular del 15 de abril para la elección de la Asamblea Constituyente, ha sumido a Ecuador en una nueva crisis política que ha enfrentado al Congreso entre sí y a éste con el Tribunal Electoral sobre la legalidad del referéndum.
Miles de personas tomaron las calles guayaquileñas bajo la atenta mirada de 1.400 policías. Los dos bandos, aunque no lejos los unos de los otros, estuvieron siempre separados por vallas de seguridad, reforzadas por una impenetrable hilera de agentes. Tal vez por esto no hubo incidentes de gravedad. La marcha en favor de Correa llenó la avenida principal Nueve de Octubre. La otra, encabezada por el alcalde de Guayaquil, el socialcristiano Jaime Nebot, se concentró en los bajos del Palacio Municipal.
Correa no estuvo presente, pero en su lugar habló el ministro de Economía, Ricardo Patiño. "Estamos luchando para cambiar el país, con total democracia. Estamos cansados de ser oprimidos por una partidocracia corrupta que queremos eliminar", afirmó Patiño. Correa, desde Quito, envió un mensaje de agradecimiento a sus seguidores y criticó al alcalde Nebot, un hombre muy respetado en su ciudad.
Nebot, por su parte, dijo que siempre estaba en favor del "derecho del pueblo a pronunciarse en una consulta popular". "Nosotros también queremos que el pueblo se exprese. Que
no venga [Correa] con esas mentiras de que nosotros no queremos cambio ni consulta. Queremos un cambio profundo, pero para bien". Sin embargo, exclamó el alcalde,"esta ciudad y en esta provincia nunca gritarán socialismo o muerte (...). Siempre gritaremos lo que proclamó Bolívar: Libres o muertos... ¡Viva Guayaquil!".
