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Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

In memóriam: André Gunder Frank, economista, sociólogo... maestro

André Gunder Frank falleció a consecuencia de un cáncer en Luxemburgo el pasado 23 de abril, en donde actualmente profesaba en el Luxembourg Institute for European and International Studies, compartiendo su intensa actividad docente, investigadora y de divulgación científica en el World History Center de la Northeastern University (Boston, EE UU) y en la Universitá di Calabria (Italia).

Presionada su familia por el régimen nazi, Gunder Frank llega a Estados Unidos en 1941 y, tras sus estudios secundarios y universitarios en Economía, se doctora en 1957 en la Universidad de Chicago con una tesis sobre la agricultura soviética. Su paso por Chicago fue crucial: participa activamente en los seminarios (talleres en la terminología de los Chicago Boys) de Milton Friedman, Arnold Haberger, Ted Schultz..., el renovado parnaso del neoliberalismo.

Según explicó el propio Gunder Frank, su rechazo a los sofismas en ciencia económica reiteradamente utilizados en los talleres y las recomendaciones de Haberger ("Usted, André, jamás llegará a ser un buen economista") o de Friedman ("Sería más conveniente que fuera buscando una plaza en una pequeña universidad de letras") mostraban el sectario interés para que abandonara la Universidad de Chicago. Vivencias que Gunder Frank relató magníficamente en un breve pero intenso epistolario personal e intelectual, a través de dos cartas abiertas dirigidas a ambos mentores del Departamento de Economía de la Universidad de Chicago, tras el golpe militar de Pinochet en 1973.

En Chile, Gunder Frank recaló en 1967 con un enorme bagaje intelectual. Con el reconocido respaldo de su esposa chilena, Marta Fuentes (cuyo fallecimiento en 1993 supuso el inicio de su larga lucha contra el cáncer y un fuerte aldabonazo afectivo del que no se recuperó jamás de forma plena), André Gunder Frank aunaba no sólo una perspectiva crítica frente a las visiones convencionales y más simplificadas del neoliberalismo que conoció directamente en el taller monetario de Friedman y en el taller de finanzas públicas de Haberger, sino que, además, introduce en los círculos académicos más abiertos y radicales de América Latina el pensamiento neomarxista norteamericano nucleado en la Monthly Review, con la impronta de Baran y de Sweezy.

La viva relación intelectual y académica que André Gunder Frank mantuvo con sucesivas generaciones de científicos sociales latinoamericanos impulsó la génesis y la consolidación de las corrientes más radicales y concienciadas de la Teoría de la Dependencia, junto con Theotonio dos Santos, Ruy Mauro Marini, Vania Bambirra, entre otros.

Su prolífica obra tampoco estuvo ajena al debate e, incluso, a la continua controversia -baste decir que tiene más de 30.000 entradas en la red-. Las tesis que mantuvo sobre "el desarrollo del subdesarrollo"; en torno a la implantación del más genuino capitalismo en América desde el siglo XVI; sobre la existencia de una raquítica lumpenburguesía en procesos igualmente de lumpendesarrollo como caracteriza la situación periférica, dependiente y vulnerable del capitalismo en América Latina; sobre el lastre de la deuda externa en los países en desarrollo y las ironías políticas y socioeconómicas del actual sistema mundial globalizado, etc., constituyeron temas en los que Gunder Frank demostró un pensamiento acrisolado, digno de un intelectual consecuente con sus ideas y con el irrenunciable compromiso -incluso con sus errores y sombras- en la búsqueda de la verdad histórica y en la anhelada transformación de la sociedad.

En los últimos años, la obra de Gunder Frank se enriqueció con los matices vinculados a la corriente de pensamiento histórico de los World Systems, superponiendo a la interpretación de I. Wallerstein el balance histórico del papel que jugó China en el sistema mundial, especialmente en Re-Orient, una de sus últimas obras.

De esta forma, el trabajo universitario, la obra y la influencia de Gunder Frank se prodigó en todo el mundo, con especial énfasis en América Latina. Como profesor de Antrolopolgía en la recién inagurada Universidad de Brasilia (en 1963 y de la mano del recordado Darcy Ribeiro); como profesor de Economía en la Universidad Autónoma de México (1965-1966); como profesor de Sociología y Economía en la Universidad de Chile (1968-1969)..., y como profesor visitante y fecundo congresista hasta, prácticamente, su fallecimiento.

Una de las facetas más interesantes de su personalidad fue su relación con los más jóvenes alumnos, que tuvimos en el maestro Gunder Frank no sólo una de las fuentes de nuestra vocación americanista en ciencias sociales, sino un continuo acicate para profundizar en nuestra labor docente, investigadora y de divulgación. Al respecto, guardo con especial cariño su nota manuscrita en 1989, desde la Universidad de Amsterdam, para darme su enhorabuena por la publicación de un libro sobre la génesis e implicaciones del monetarismo y la deuda externa en el Cono Sur latinoamericano.

Tras cruzar, recientemente, nuestras respectivas trayectorias académicas en cursos impartidos en CEPAL y la presencia en el Seminario Internacional que Theotonio dos Santos organizó en la Universidad Federal Fluminense, en agosto de 2003, la última vez que tuve oportunidad de hablar telefónicamente con el maestro Gunder Frank fue en Santiago de Compostela a lo largo del III Congreso Internacional de Historia a Debate, en julio de 2004. Participó activamente en varias mesas del congreso y presentó una intervención magistral sobre Re-Orient Global Historiography and Social Theory.

Días antes, mediante mensaje por correo electrónico, había aceptado mi invitación a un paseo vespertino por las calles de Compostela, en plena vorágine del Xacobeo, y la inevitable visita a las tabernas históricas de Santiago. Desde la Residencia Universitaria del Bosque de la Condesa, donde se hospedaba con su característica sobriedad, me llamó y se disculpó por no acudir a la cita por una indisposición inesperada. Desafortunadamente, la fatal enfermedad avanzaba sin pausa...

José Ramón García Menéndez es profesor de Economía Aplicada en la Universidad de Santiago de Compostela

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