"Apostamos por el diseño, la calidad y el servicio"
Cerca de 90.000 personas en España se hacen sus trajes y sus camisas en Q-ellos, una empresa especializada en la confección a medida de estas prendas, que celebra su 20º aniversario. Juan García (Madrid, 1960) es el fundador y único socio de esta compañía de capital 100% español. En las 19 tiendas, ninguna franquicia, que Q-ellos tiene repartidas por Madrid, Barcelona,Vizcaya, Pamplona, San Sebastián y Valladolid, más una en Bruselas, los clientes pueden comprar artículos para vestir y tienen la posibilidad de diseñar sus trajes y camisas a través de Internet. En 2004 la compañía vendió 95.000 camisas y 4.000 trajes, que se confeccionaron en sus fábricas de Madrid y Navarra. La facturación alcanzó los siete millones de euros.
En 2004, la compañía vendió 95.000 camisas y 4.000 trajes, que se confeccionaron en sus propias fábricas, y facturó siete millones de euros
Pregunta. ¿Cómo empezó todo?
Respuesta. Todo comenzó como una locura, con la idea de emprender un negocio más. Por aquel entonces, con 24 años, vendía a las tiendas calzoncillos que yo mismo encargaba fabricar. De ahí pasé a las camisas por encargo y luego a las camisas a medida, hasta que abrí la primera tienda en Madrid.
P. ¿Quién es el cliente de los trajes a medida?
R. Nuestros clientes responden a un perfil socioeconómico alto o medio alto. Puede ser el señor acostumbrado a ir al sastre de toda la vida que se da cuenta de que el tejido y la construcción del traje es la misma que la de los sastres, pero a un precio mucho más asequible, o bien el ejecutivo joven que necesita tener una buena imagen. Tanto unos como otros van buscando calidad, ir bien vestidos lejos de la moda que ofrecen las grandes cadenas. Por eso, Q-ellos no se ha visto afectado por la explosión de ese tipo de empresas y tenemos unos clientes muy fieles.
P. ¿Cómo han cambiado a lo largo de estos 20 años?
R. Más que la clientela, ha cambiado el mercado y, por tanto, nuestra estrategia. Hace 20 años el precio de una camisa por encargo buena y con estilo era una locura. En Q-ellos intentamos ofrecer unos precios más competitivos, pero la época coincidió con la explosión de las cadenas de ropa y el mercado se disparó. La demanda de trajes y camisas a medida empezó a ser mayor y continuamos poniendo el acento en la calidad de los productos. Ahora el efecto China está volviendo a reproducir aquella situación y vamos a seguir en la misma línea, apostando por el diseño, la calidad y el servicio a los clientes. Si no trabajamos con estos valores en mente, me atrevería a decir que en 15 años nuestro negocio podría desaparecer.
P. ¿Qué tiene de artesanal el negocio de Q-ellos?
R. Yo creo que el trabajar con mimo, no sólo respecto a la fabricación de nuestros artículos, sino también a la atención que damos al cliente. La gente que trabaja en nuestras tiendas tiene muy claro que su tarea va más allá de tomar las medidas al cliente y vender el producto. Hay que asesorar, saber por dónde va la moda, etcétera.
P. ¿Cómo le gusta vestir al español cuando va de traje?
R. El azul y el gris siguen siendo los colores más escogidos para las chaquetas, los pantalones o los abrigos, pero el hombre es cada vez más coqueto, y los diseños, más atrevidos.
P. ¿Reciben encargos de mujeres?
R. Por supuesto. El 20% de los encargos son de trajes y camisas para ellas. No descartamos alguna vez desarrollar una línea femenina, pero ahora no es un proyecto definido.
