El inculpado del 'caso Costa Polvoranca' huye de la justicia El 'asesino del naipe' usó la misma arma en todos los crímenes, según la policía

Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que testificaron ayer en la séptima sesión del juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Madrid contra Alfredo Galán Sotillo, el supuesto asesino del naipe, coincidieron en señalar que el autor de los hechos utilizó "sin ninguna duda" una misma arma en todos los asesinatos: una Tokarev yugoslava con cargador para nueve balas del calibre 7,62 milímetros.

José David Fuertes Sánchez, el único acusado del homicidio del angoleño Ndombele Augusto Domingo, de 16 años, en la zona de copas Costa Polvoranca, de Alcorcón, no acudió ayer a la vista del Tribunal Superior de Justicia de Madrid en la que se iba a decidir si ingresaba en prisión. Los magistrados cursaron ayer una orden de búsqueda y captura y de ingreso en prisión inmediato, según informaron fuentes judiciales.

La Sala de lo Civil-Penal del Tribunal Superior de Justicia dictó una sentencia en la que admitía el recurso presentado por el fiscal y las acusaciones particulares. Los magistrados entienden que hay que repetir el juicio celebrado el pasado octubre, ya que el fallo del jurado popular no estaba suficientemente motivado y que no se tuvo en cuenta a un testigo que vio cómo José David Fuertes golpeaba al fallecido.

Según el fallo del Tribunal Superior de Justicia, el jurado popular utilizó un lenguaje "confuso, gramaticalmente incorrecto y falto de claridad y precisión" en la resolución judicial recurrida cuando explica que uno de los motivos por los que Fuertes fue absuelto es la "ausencia de consecución temporal de los hechos declarados probados por los testigos de las distintas partes, que impide establecer la secuencia de las diferentes agresiones reseñadas en cada testimonio".

Un comunicado del Tribunal Superior asegura que antes de que fuera leída la sentencia ordenó al Cuerpo Nacional de Policía la detención y localización del único inculpado, ya que se encontraba en paradero desconocido desde hacía varios días. La sala había fijado para las once de la mañana de ayer la comparecencia del acusado, pero éste no acudió ni custodiado por la policía ni de forma voluntaria. Por eso, los magistrados dictaron una orden de busca, captura e ingreso en prisión sobre esta persona. Cuando sea localizado, el tribunal citará a las partes de nuevo a esta comparecencia.

Rápida localización

El presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, vio en la ausencia de Fuertes que éste quiere "ocultarse, esconderse ante la responsabilidad de lo sucedido". "Era una de las posibilidades y desde luego no dice nada a su favor el que no se haya presentado", señaló Ibarra, quien espera que la policía detenga en breve a este inculpado. "Tenemos una buena policía y, si ya fue capaz de detenerlo cuando estaba oculto en Torrevieja, no creo que tarde mucho en arrestarlo", concluyó el presidente del Movimiento contra la Intolerancia.

Paulina Kikawanakio, la madre del joven asesinado, visiblemente emocionada, comentó que aún está esperando justicia. "La policía va a coger a este hombre allá donde esté porque tiene la sangre de mi hijo en sus manos. Ahora Ndombele está en una tumba y lleno de bichos por su culpa, todos estamos sufriendo por lo que hizo", manifestó.

La letrada de la defensa, Ana Ruiz Velilla, no quiso pronunciarse ante la ausencia de José David; tan sólo quiso señalar que "por supuesto" recurrirá en casación ante el Tribunal Supremo.

Algunos testigos refirieron en la sala que las balas encontradas en el lugar de los hechos "son muy parecidas a las que se usan para cargar una pistola Tokarev yugoslava" y añadieron que esta marca también fabrica armas en Egipto, Corea del Norte, Hungría, Rusia, China y Polonia.

Otro agente apuntó que en España nunca se ha fabricado una pistola de estas características y señaló que las primeras Tokarev fueron diseñadas en los años treinta por la Unión Soviética como armas oficiales del Ejército.

El día que el imputado se entregó ante la policía de Puertollano (Ciudad Real) y se confesó autor de seis homicidios consumados y tres en grado de tentativa aseguró que siempre disparaba a sus víctimas con una pistola Tokarev que había traído a España procedente de Bosnia oculta en un televisor. Asimismo, relató que días antes de entregarse tiró el arma a un contenedor de basura cercano al domicilio de sus padres en la calle de la Encomienda de la localidad ciudadrealeña.

En julio de 2003, un equipo policial buscó el arma en el vertedero de basuras situado en el término municipal de Almodóvar del Campo (Ciudad Real), a donde van a parar los residuos sólidos urbanos, entre ellos los de Puertollano. La búsqueda no dio el resultado esperado y la Tokarev sigue sin aparecer hoy día.

Tres marcas

Varios guardias civiles que participaron en las pesquisas señalaron ayer que los naipes correspondientes al dos de copas, encontrado junto al cuerpo de Eduardo S. E., superviviente del tiroteo de Tres Cantos, y al tres y cuatro de copas, localizados al lado de los cuerpos de Gheoghie M. y Doina M., encontrados muertos en un descampado de Arganda del Rey, "tenían un punto azul en el reverso cuya tinta no se correspondía con un bolígrafo Bic, sino con un rotulador de tinta indeleble".

Además, confirmaron que todas las cartas eran similares en tamaño y textura, pero destacaron que no compartían el color en el reverso, especificando que el as, el tres y el cuatro de copas tenían la parte trasera de color verde, mientras que el dos de copas era de color rosa.