Un glaciar en el corazón de Vicálvaro
El parque de ocio de la naturaleza Faunia ofrece una visita a través del interior de una gruta de hielo
Madrid
El paisaje de grúas y de cruces de carreteras de Vicálvaro esconde una helada sorpresa: el interior de una gruta de hielo excavada en el corazón de un glaciar. Con pingüinos. El parque de ocio de la naturaleza Faunia apuesta estas navidades por el frío. La visita promete y requiere ropa de abrigo: hay que adentrarse en un túnel de hielo. El hueco tiene poca luz y un suelo hecho de rocas y muros de dos metros de altura que representan las rocas cortantes por la helada. "Hay una bóveda de hielo con estalactitas, que se apoya sobre la parte superior de las rocas y recubre el techo de la ruta", explican los responsables del parque. La visita permite pasar junto a cataratas de hielo, conocer el aspecto de un colmillo de megadolón (un tiburón fósil), el esqueleto de una ballena blanca o descubrir el origen de un meteorito encontrado en la Antártica en 1984.
En el recorrido, el visitante no está solo. Podrá pasar al lado de una nueva exhibición de pingüinos de Humboldt, que están en peligro de extinción. Con esta nueva especie, Faunia completa las seis clases de pingüinos más representativas: Adelia, Magallánicos, Rey, Humboldt, Gentoo y Saltarocas. "Somos el mayor ecosistema polar de Europa", apostillan desde el centro de ocio. Un privilegio: la formación de nidos excavados en la roca permite al visitante ser testigo del proceso de cortejo y cría del pingüino de Humboldt. El interior de la gruta esconde también tres acuarios (uno cilíndrico y dos semicirculares) y un "aula viva", donde los niños podrán conocer el ecosistema polar y los animales que lo habitan. "Estas aulas forman parte del programa educativo que Faunia dirige a los centros escolares", explican en el parque de ocio.
Además, Faunia pone en marcha para las vacaciones unos campamentos para niños entre 4 y 12 años para que los chavales entren en contacto con los animales a través de juegos y talleres. Hay dos turnos: del 27 al 31 de diciembre (125 euros) y del 3 al 5 de enero (90 euros). (Más información en el 91 301 62 35 y en www.faunia.es). El frío también ha atraído a Papa Noel hasta este rincón de la capital: hoy domingo dará una vuelta por Faunia.
El parque de Vicálvaro no es el único que está de estreno con nuevos animales. Hasta el Aquarium del Zoo de Madrid ha llegado un nuevo ejemplar de tortuga boba que se suma a las 500 especies que exhibe esta instalación. El nuevo vecino es un macho de más de 40 años de edad que pesa 21 kilos. Vive en un acuario de 200.000 litros de agua salada con otras dos tortugas marinas. Además, el pasado 4 de noviembre nació en el Zoo una cría de delfín mular que, de momento está recibiendo tratamiento de dios: le han bautizado Zeus.
En el zoo también hay talleres para los más pequeños (entre 5 y 14 años): están dedicados a las aves rapaces, a los grandes depredadores, a los animales en peligro de extinción y a los rastros y restos de animales. (Más información en el 91 512 37 70). Estas actividades infantiles cuestan alrededor de 40 euros y duran hasta el próximo 4 de enero.
