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Reportaje:

La 'Pachonmanía' estalla en Getafe

El futbolista Sergio Pachón desbanca a ídolos como Raúl o Fernando Torres entre la afición del sur de Madrid

Aún no hay ningún estadio que lleve su nombre, como ocurre con el Coliseo Alfonso Pérez de Getafe, ni le han homenajeado con unos campos de fútbol, tal y como ocurrió con Raúl González en la Universidad Rey Juan Carlos, pero Sergio Pachón puede jactarse de haber desplazado a más de un galáctico y otras estrellas de Primera División en el catálogo de deidades de los vecinos del sur de Madrid.

Los niños de Getafe, por ejemplo, ya no admiran tanto a Fernando Torres o a Raúl. Prefieren lucir la camiseta azulona del equipo local con el número 17 en la espalda. Y los adultos hacen cola para ingresar en la peña Pachón, que nació cuando los del Geta subieron a Primera.

"A este hombre le tendrían que poner una calle en el municipio, porque colaboró con cinco goles a que el equipo subiese a Primera División, y eso es historia", clama el presidente de la peña, Antonio Martín Tabares. De momento, la directiva está pensando en sugerir al alcalde de Getafe, Pedro Castro, que levante un monumento a Pachón en la fuente de La Cibelina, lugar donde los forofos celebran cada victoria del Geta.

"Cuando veo mis camisetas y mis fotos me siento muy querido", dice el jugador

Antonio no podía imaginarse hace seis años que ahora estaría reclamando agradecimientos institucionales para Pachón, al que conoció cuando jugaba en Segunda División. "Yo le conocía porque es vecino de mi hermano y, aunque le seguía cuando jugaba en el Valladolid, empecé a acercarme más a él cuando vino al Getafe", relata el presidente de la peña. "Entonces surgió un grupo de cuatro o cinco aficionados que no faltaba a ningún entrenamiento; no podíamos imaginar que el equipo subiría a Primera, y, en cuanto lo hizo, se nos ocurrió rendir un homenaje al futbolista creando la peña", recuerda.

La pasión con que estos peñeros idolatran al delantero del Getafe les ha llevado incluso a rastrear todas las administraciones de lotería del municipio hasta encontrar un número "con mucho significado" para jugar en el sorteo de Navidad. "Por un lado buscábamos un número que terminase con el 17 de la camiseta de Pachón, pero también nos interesaba reflejar la fecha de nacimiento de la peña, que fue el 23 de agosto", explica Martín Tabares. Así que compraron todos los décimos del 23017.

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"Además, los dígitos suman 13, que es el número de orden que tenemos en la lista de peñas de Getafe", celebra el presidente. En veinte días han vendido toda la lotería, así que la directiva ha recurrido a la rifa de fotos y camisetas del jugador para calmar las ansias fetichistas de los seguidores.

El propio jugador sigue con orgullo los avatares de la peña que lleva su nombre y alimenta la ilusión de sus integrantes, sobre todo de los más jóvenes. "Tarda más de una hora en llegar al vestuario después de los entrenamientos porque se detiene a firmar autógrafos a todos los chavales, habla con ellos y jamás tiene una mala palabra", explica Antonio. "Un día la peña se nos llenó de chicos que se enteraron de que Pachón iba a visitarnos, pero, ante el retraso del jugador, se tuvieron que marchar al colegio. En cuanto salieron de clase volaron a la sede de la peña cargados de cuadernos de todos los compañeros que deseaban un autógrafo del futbolista", rememora. "Todo el mundo le adora y le aclama después de los entrenamientos; es el ídolo de la afición de Getafe y, si cabe, es tan buena persona como jugador", añade.

A Sergio Pachón no le importa enfriarse mientras planta su rúbrica en los cuadernos escolares de sus seguidores más menudos. "Me gusta hacerlo porque me recuerda a cuando yo estaba en el otro lado; también he sido niño y me ha gustado que me hicieran caso los jugadores a los que yo pedía un autógrafo", dice. También le llena de satisfacción que exista una peña en su honor. "Cuando paso por la sede y veo mis camisetas y mis fotos me siento muy querido", afirma este futbolista de 27 años. Y agradece el caluroso apoyo de sus miembros, sobre todo en los partidos en campo contrario. "Después de calentar levanto la vista y veo a la afición que me saluda. Yo les saludo y me siento como en casa; estoy profundamente agradecido a esa gente que ha montado una peña por mí sin pedir nada a cambio", agrega Pachón.

Los peñeros no escatiman esfuerzos a la hora de demostrar su adoración al jugador. En el partido de ida contra el Real Madrid había 1.500 personas que se habían desplazado desde el municipio espoleadas por las peñas, que quieren repetir hazaña en abril cuando el Geta se enfrente al Barcelona.

"Estamos preparando el viaje con mucha ilusión porque pisar el Camp Nou y poder acompañar al Getafe es algo casi increíble", comenta eufórico Antonio Martín Tabares. "Yo confío mucho en el equipo y, sobre todo, en Pachón, que va a meter 20 goles en esta Liga", sentencia.

14 peñas para cantar 'gol'

El ascenso del Getafe a Primera ha provocado el nacimiento de seis nuevas peñas que se suman a las ocho que ya existían. La más numerosa de las recién nacidas, Marea Azul, aglutina a 150 socios que planifican sus fines de semana en función del calendario deportivo.

"El primer mandamiento de todas las peñas es acompañar y animar a los jugadores tanto dentro como fuera de casa", explica el presidente de la asociación de peñas del municipio, Sergio Donoso. La tradición futbolera y la voluntad de los seguidores del equipo puede ser la razón del éxito de este tipo de colectivos, al decir de Donoso. El más antiguo es La Amistad, una peña que nació en 1970 y que aún conserva a una veintena larga de socios en su sección futbolística. El Botellín, con cuatro años de trayectoria, se ha erigido como la peña-puente entre las veteranas y las nuevas, facilitando el diálogo a las más de 900 personas afiliadas a alguna de las 14 agrupaciones de Getafe.

Y, puestos a ser originales, una de ellas rinde homenaje al utillero del equipo, Francisco Cabezas, Peñi, que lleva 27 años como "galáctico del material deportivo del Geta", según bromea un portavoz de los 97 socios de esta peña. Todas estas asociaciones están registradas en el Ayuntamiento, disponen de estatutos y gestionan las cuotas de sus asociados. El ascenso a Primera ha propiciado también la creación de grupos de aficionados que no faltan a los entrenamientos y acompañan al Getafe tan lejos como les permiten sus bolsillos.

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