La Complutense quiere que el Arco de la Victoria se llame de la Concordia

El Arco de la Victoria, construido en 1956 para festejar el triunfo del general Franco sobre la República en la Guerra Civil, va a cambiar de nombre. No será a iniciativa del gobierno municipal, que hace sólo seis días se negó a retirar de las calles las referencias franquistas, sino por decisión del Consorcio Urbanístico Ciudad Universitaria (donde hay una representante del Consistorio), porque el monumento está en demarcación de la Complutense. El arco pasará a denominarse de la Concordia o bien de Moncloa. Pero la avenida en la que se halla seguirá llamándose del Arco de la Victoria.

El Consorcio Urbanístico Ciudad Universitaria -integrado por las Universidades Complutense, Politécnica y UNED y, en nombre del Ayuntamiento de Madrid, la concejal de Urbanismo, Pilar Martínez- llevaba tiempo debatiendo la propuesta del rector de la Complutense, Carlos Berzosa, para cambiar de nombre el Arco de la Victoria y eliminar del monumento la simbología franquista. Finalmente, el pasado octubre, el consorcio universitario -que tiene la potestad sobre el arco por hallarse en su zona de jurisdicción- aprobó "por unanimidad" el cambio de nombre, según confirmó ayer a este periódico Carlos Baztán, coordinador general de la Concejalía de las Artes.

Esta concejalía es la responsable de modificar los registros de calles y monumentos cuando se introduce algún cambio en los nombres, y por eso se le notificó la decisión. "Nosotros dijimos que nos parecía muy bien el cambio, pero que, según un informe jurídico del Ayuntamiento, la competencia sobre ese arco es de la Complutense, y no del Consistorio. De modo que era el consorcio el único que debía pronunciarse. El consorcio estuvo de acuerdo, y nos dijo que seguiría adelante con la tramitación. Después ya no sé más", explica Baztán.

Lo que ocurrió después es que la edil Pilar Martínez se dio cuenta de que si se cambiaba el nombre en los callejeros, pero no se modificaba la leyenda escrita en latín sobre el friso central, que celebra la victoria franquista, el arco iba a acabar siendo "el de la discordia, y no el de la concordia". Trasladó sus dudas al consorcio universitario, y éste acordó pedir permiso a la Dirección de Patrimonio de la Comunidad para poder tocar el friso. A la espera de ese trámite, se encuentra el proceso, según un portavoz de la Complutense.

La leyenda, en la parte que da a Moncloa, reza así: "Fundada por la magnificencia regia y restaurada por el duce [caudillo] de los españoles, la sede de los saberes de Madrid florece ante la mirada de Dios". En la parte opuesta está escrito: "A las armas que han vencido aquí, la mente que vencerá siempre ha dedicado como regalo este monumento".

Votación en pleno

El PP rechazó con su mayoría absoluta, en el pleno municipal del pasado viernes, la propuesta de PSOE e IU de retirar de las calles de Madrid las referencias a dirigentes franquistas -especialmente la estatua del general Francisco Franco en la plaza de San Juan de la Cruz- y cambiar la denominación de calles y monumentos de aquella época, entre ellos el Arco de la Victoria. El vicealcalde, Manuel Cobo, alegó para justificar el rechazo de su grupo que incluso el ex presidente socialista Felipe González se había mostrado en contra de eliminar de las ciudades las huellas del pasado reciente de España, por muy dolorosas que fueran.

Sin embargo, el gobierno municipal no ha puesto objeciones en otro foro, el Consorcio Urbanístico Ciudad Universitaria, a esa misma propuesta sobre el Arco de la Victoria.