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Tribuna:9 D'OCTUBRE
Tribuna
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Adelante

El 9 d'Octubre es la fiesta de los valencianos. Lo dice nuestro Estatuto de Autonomía y lo dice nuestro corazón: es la fecha que hemos elegido para celebrar nuestra singularidad como comunidad, como conjunto de hombres y mujeres que se identifican con una historia y una cultura compartidas. Debe ser uno de los pocos símbolos de los valencianos que los valencianos nunca hemos discutido. Afortunadamente. El 9 d'Octubre nos remite a la historia y al presente.

El 9 de octubre de 1238 Jaime I entraba, conquistador, en la ciudad de Valencia, cap i casal del que pronto iba a ser un nuevo reino hispánico. Esa es la historia.

El presente lo marca la decisión de coger la fecha del 9 de octubre como símbolo de nuestra identidad, de un pasado de autogobierno foral que nada tiene que ver con las modernas instituciones democráticas, pero que señala la singularidad histórica de un territorio y de los que lo habitaron. El presente es, por lo tanto, tradición y mutación al mismo tiempo.

Asumimos la tradición, la historia. La asumimos para avanzar, para basarnos en ella para progresar y mirar el futuro con ideas y con impulso innovador. Cuando, durante la Transición, se constituyó en España el Estado de las Autonomías, se miró también atrás, a la historia. La mirada se quedó corta. Se fijó en los años de la Segunda República, y se paró la atención en aquellas comunidades que habían tenido Estatuto de Autonomía o habían comenzado su tramitación. En ese caso estaban Cataluña, el País Vasco y Galicia. En consecuencia, esas comunidades o nacionalidades fueron declaradas históricas y obtuvieron una vía de acceso a la nueva autonomía más rápida y más ancha en cuanto a las competencias. Repito: la mirada se quedó corta.

Es la hora de echar mano de la tradición para seguir avanzando. Es la hora de mejorar nuestro Estatut d'Autonomia. Esto es lo que el partido del cual soy secretario general, el PSPV, intenta impulsar, desde la serenidad, desde el debate de ideas y propuestas, desde el trabajo de un grupo humano que ya se ha puesto a la faena. También desde la firmeza de mi convicción en el potencial de nuestra Comunidad Valenciana. Un potencial que sólo la mencionada reforma puede desarrollar.

El 9 d'Octubre nos indica que la historia nos acompaña en el nuevo camino: durante siglos, más de cinco siglos, lo que ahora es la Comunidad Valenciana se autogobernó. Es verdad que, durante la Segunda República, aunque hubo un movimiento pro estatuto de gran alcance y relevancia, no se remató la tarea con la tramitación de un Estatut d'Autonomía. El desacuerdo entre los partidos lo hizo imposible. Ahora la situación es muy diferente: el consenso básico existe. Al Gobierno actual de la Generalidad le falta, me parece, el impulso político necesario por convertir la Comunidad Valenciana en un ámbito de autogobierno más ambicioso. Mi partido, el PSPV, está dispuesto a hacer 9 d'Octubre con el actual Gobierno, a llegar a acuerdos que impulsen la reforma estatutaria, a ayudar en lo que sea necesario con tal de modificar una situación, la actual, que la historia no avala. Porque la Segunda República duró nueve años, tres de ellos en guerra. Y el antiguo reino pervivió más de cinco siglos. No hay comparación posible. Está la historia. La que nos dice que alcanzar mayores cotas de autogobierno de los valencianos es posible y deseable. Es la hora de que nuestro 9 d'Octubre se convierta en una palanca para el progreso, en un trampolín para dibujar un nuevo marco estatutario dentro de un proyecto de estado plural favorecido por el Gobierno central que preside José Luis Rodríguez Zapatero.

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La primera marcha por la autonomía tuvo lugar en octubre de 1977 y concluyó el día 9 en la ciudad de Valencia, en la Plaça dels Fuers. Un millón de valencianos se unieron para dar apoyo a aquel volem l'Estatut. Y tuvimos el Estatut en 1982, fruto de la voluntad social y del nuevo ordenamiento constitucional del país. Ahora el 9 d'Octubre debe convertirse en la segunda marcha por la autonomía. Veintidós años de vigencia del Estatut actual nos han dado sobrada experiencia. Es un texto clave en la historia de los valencianos y quiero rendirle homenaje. Pero no es un monolito de piedra. Es una ley para las personas y las personas cambian, se hacen autonómicamente adultas. Mutan, se transforman, progresan. Es la hora del 9 d'Octubre y de seguir hacia adelante. Adelante hacia la reforma y hacia la mejora de nuestro Estatut d'Autonomia.

Joan Ignasi Pla es secretario general del Partit Socialista del País Valencià (PSPV-PSOE).

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