Caballos cree que su relevo como portavoz es un "ajuste de cuentas"
El portavoz socialista en el Parlamento andaluz, José Caballos, interpreta la decisión que ha tomado la dirección de su partido de apartarle del puesto como "un ajuste de cuentas" por defender posiciones "legítimas" en los congresos. "Yocreía que en el PSOE no se pagaba un precio por eso", declaró ayer. Caballos salió así al paso de las manifestaciones de destacados dirigentes socialistas que sostienen que su relevo estaba zanjado ya en julio, después de los congresos federal, regional y provincial de Sevilla, por haber "perdido la confianza", además de "someter al partido a mucha tensión".
El portavoz negó, como aseguran fuentes de la dirección, que durante este mes se le hayan hecho llegar, a través de terceros, mensajes para que presentara voluntariamente su renuncia o hiciera cualquier otro gesto para recomponer las relaciones. "Nadie ha hablado conmigo ni se ha dirigido a mí de forma directa o indirecta, ni de la ejecutiva andaluza ni de la provincial. De hecho, el secretario de Sevilla, José Antonio Viera, ha estado reiterando declaraciones de voluntad de diálogo, pero yo no he recibido ninguna llamada, y en política lo que cuenta son los hechos", dijo.José Caballos adelantó que la decisión sobre si dimite antes de que la ejecutiva regional, que se reúne el próximo viernes, apruebe su sustitución la tomará "cuando alguien hable conmigo y me lo diga, entonces veré lo que hago". Y recordó que la propuesta de sustitución la tiene que hacer el secretario general.
Tras dejar claro que su intención es "aclarar las inexactitudes pero no polemizar", calificó de "rotundamente falso" que se le haya sugerido bajo cualquier fórmula enviar una carta al secretario general, Manuel Chaves, que sirviera de punto de retorno: "El secretario general tiene una carta mía amplia que le entregué personalmente el pasado 13 de julio, dos días antes del congreso regional, donde le pedía una reunión, y todavía estoy esperando".
El portavoz socialista dijo que durante este proceso ha actuado siempre con "total transparencia" para defender una tesis "razonable" en los tres congresos de su partido, "que están para debatir", y "no voy a pedir perdón por decir lo que creía y sigo creyendo".
José Caballos agregó que las discrepancias internas y partidarias se podrían haber resuelto y, en cualquier caso, nunca deberían reflejarse en su trabajo como portavoz parlamentario. "Nadie jamás ha cuestionado mi labor en el grupo, he estado durante diez años al cien por cien y con un lealtad total hacia el partido y Manuel Chaves", afirmó, "por lo que no se puede entender en otra clave que un ajuste de cuentas".
Respecto a las dos reuniones que fuentes del PSOE aseguran que Caballos intentó montar durante las vacaciones para reorganizar la oposición a Viera, no negó que haya "hablado con compañeros, pero eso no es conspirar".
Sobre el fondo de la crisis entre el portavoz y la dirección socialista, aseguró que en ningún momento pidió a Chaves y al secretario de Organización, Luis Pizarro, recuperar el número tres del partido, sino que solicitó para el PSOE de Sevilla lo que creía justo.
Según fuentes de la ejecutiva, la dirección regional se pondrá en contacto con Caballos a lo largo de esta semana e iniciará los tanteos para elegir al nuevo portavoz del PSOE.
